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Actualizado: 26 ene 2020 / 10:45 h.
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Is 9,1-4; Sal 26; 1 Cor 1,10-13.17; Mt 4,12-23

Al inicio de su vida pública, Jesús se traslada de Nazaret a Cafarnaúm, en el territorio de Zabulón y Neftalí. Él comienza su ministerio desde los márgenes: «en la Galilea de los gentiles». Esta noticia geográfica revela que el designio divino permanece constante en las tres etapas de la historia de la salvación: Israel, Jesús y la Iglesia. Como Dios realizó la liberación de Neftalí y Zabulón de la mano de los asirios (Isaías 9), ahora Jesús predica el Reino comenzando por esta región, la «Galilea de los Gentiles» (Mateo 4). Así también, en fin, la Iglesia a la que escribe Mateo está viviendo la conversión de muchos gentiles. Por ello, la «Galilea de los Gentiles» sigue siendo el hoy de la misión eclesial.

Tras trasladarse a Galilea, el Jesús de Mateo llama a Pedro, Andrés, Santiago y Juan. Él no es un asceta solitario o un predicador huidizo, sino que, desde sus inicios, se acompaña de discípulos. En este relato vocacional resaltan tanto la palabra imponente de Jesús que lleva indefectiblemente al seguimiento total, como la misión encomendada: ser «pescadores de hombres». Esta misión no implica solo incluir nuevos discípulos a la barca eclesial, sino que evoca también el don de la vida. Si el pez en el agua vive, el hombre en el mar muere. Si el pescador lleva los peces de la vida a la muerte, el pescador de hombre rescata a los humanos de la muerte y los lleva a las tierras de la vida. Ser «pescador de hombres», en conclusión, implica dar vida, a imagen de Jesús.

En la segunda lectura, Pablo exhorta a los corintios a la concordia. Ellos están divididos porque se conducen con criterios mundanos: estima de la sabiduría, valoración del honor, etc. El Apóstol inicia aquí una argumentación (1 Cor 1–4) en la que les anima a cambiar de mentalidad y a adoptar los criterios del Mesías crucificado, el mejor modo de lograr la unidad eclesial.

Preguntas

· Jesús tiene un proyecto de salvación para todo el mundo. Él también te ha llamado ya o te va a llamar. ¿Cuál es tu vocación? ¿la vives con alegría?

· El evangelio llega hasta los márgenes, hasta «la Galilea de los gentiles». ¿Eres testigo de Jesús también entre los no creyentes?

· El apóstol Pablo denuncia las discordias y peleas comunitarias. ¿Eres instrumento de unidad en tu comunidad eclesial?