Ya es hora
de firmar y rubricar
la fe de vida
Noble oficio
aunque inútil desde luego,
escribir versos
Así es la vida,
gozar la luz del día
mientras escribo
Al atardecer
saborear la noche
mientras escribo
Traducir a tinta
los trinos de los pájaros
y su plumaje
Salpicar los versos,
con el agua de los mares
que he bogado
Guardar el olor
de bosques y de flores,
en hojas de papel
Mirar las almas
en sus hondos adentros
viendo sus ojos.