El Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) ha anunciado el inicio de una nueva etapa con mayor capacidad inversora en la gestión municipal tras salir del denominado 'plan de ajuste' suscrito en el año 2012. A partir de ahora el Consistorio recupera su autonomía financiera y aumenta el margen para realizar inversiones que atiendan las necesidades de la ciudadanía y permitan crecer en servicios y dotaciones a la ciudad.
Según destaca el Ayuntamiento en un comunicado, la salida del plan de ajuste es el resultado de una "gestión económica más eficaz en los últimos años de las cuentas municipales por parte del equipo de gobierno, que ha logrado reducir la deuda municipal desde los 85 millones de 2012 hasta los 16 millones de euros actuales".
El último paso ha sido la aprobación por el primer Pleno ordinario del nuevo mandato del destino del superávit de la liquidación del presupuesto de 2018 para la reducción del endeudamiento en cumplimiento de la legislación vigente. Según el gobierno municipal, este acuerdo es una "medida clave" para el nuevo gobierno de coalición que "evidencia así que da sus frutos y es rentable para la ciudadanía".
La propuesta salió adelante con los votos a favor de PSOE y Ciudadanos. Andalucía Por Sí optó por la abstención, mientras que Adelante Alcalá, PP y Vox votaron en contra. Concretamente, la liquidación del ejercicio 2018 ofreció un remanente positivo de tesorería de 8.690.505 euros que se destina a reducir el nivel de endeudamiento. De esta forma, el remanente de tesorería es superior a la deuda que queda pendiente a amortizar correspondiente al 'Plan de Pago a Proveedores', actualmente inferior a 8 millones de euros. Los informes favorables de Intervención sobre dicha propuesta de suplemento de crédito especifican que dichos créditos ni afectan a la regla de gasto ni tendrán repercusión alguna en la capacidad de financiación municipal.
Con la aprobación de esta medida "culmina el esfuerzo para salir del 'plan de ajuste' adoptado para hacer frente a las facturas pendientes y a la situación económica generada por la caída de la actividad económica a consecuencia de la crisis", que suponía qque la administración alcalareña se encontrara bajo la supervisión del Ministerio de Hacienda, según la fórmula impuesta para el plan de pago a proveedores'. El Ayuntamiento subraya que logra de esta forma reducir el tiempo previsto para el 'plan de ajuste' que se aprobó en principio para el periodo 2012-2022 y abandonar este mecanismo tres años antes de lo previsto.
En este sentido, el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra destaca que recupera su autonomía financiera y puede dedicar los próximos excedentes presupuestarios a realizar inversiones financieramente sostenibles, que se podrán destinar a nuevas infraestructuras urbanas, mejoras en las dotaciones de los barrios, nuevos espacios públicos, reformas y mejoras en los centros educativos, nuevas instalaciones deportivas, vías de comunicación y otras medidas que redunden en mejoras para la ciudadanía.