Marcaban las tres de la tarde y más de 300 personas se congregaban en la Puerta de Sevilla de Carmona para estar presentes en estos momentos de duelo por el asesinato del comerciante chino, que murió degollado por un cliente al que le reprochó que no le había pagado una cerveza. Asimismo, quiso estar presente Zhu Jian, consejero consular de la embajada de China en Madrid, y todos los grupos políticos del Ayuntamiento. También acudieron Virginia Pérez, Luis Paniagua y Juan de la Rosa del PP de Sevilla y Antonio Enamorado, alcalde popular de Lora del Río.
Con mucho respeto, los familiares y allegados aguardaron la llegada de los dos hijos de Wan y de su esposa, Sumei Chen. Chen, al ver el apoyo de los ciudadanos y conocidos, rompió a llorar de la emoción y el dolor. El propio consejero de la embajada la consoló y le mostró su apoyo y cercanía en un acto muy emotivo.
Ke Lin, portavoz del acto, comenzó afirmando que «la muerte no ha sido un accidente», e incidió en que «se tiene que hacer justicia acorde a la ley, cayendo el peso de ella sobre el asesino». Lin pidió que «todos los ciudadanos estén protegidos en España y que se mejore la seguridad para que todos tengamos una vida digna».
Igualmente, quiso agradecer la presencia del alcalde de Carmona, Juan Ávila, y de los miembros de la embajada, así como a la «Guardia Civil y Policía Local que han prestado toda su ayuda para ayudarnos en este caso». Tras esto, se guardaron tres minutos de silencio en los que la familia de Wan de nuevo rompió en llantos y lamentos por tan desgraciado suceso colocando un altar con flores y velas en su memoria.
Tras esto, el regidor de la localidad volvió a incidir en que «han sido momentos muy duros». Ávila agradeció a todo el pueblo «su rápida actuación tanto en reconocer al presunto asesino como para socorrer a Jian». Ávila centró su discurso en remarcar que quieren visualizar las quejas «al poder judicial y con la actual legislación porque es evidente que la persona que ha hecho esto no debería estar en libertad, así que debemos luchar entre todos para que estos actos no vuelvan a repetirse más».
Por último, el consejero consular, Zhu Jian, solicitó que «se lleven a cabo las acciones pertinentes para evitar cualquier tipo de violencia y delincuencia». Igualmente, agradeció a cuerpos y fuerzas de seguridad y Consistorio su trabajo, pero muy especialmente «a la colaboración y cooperación ciudadana, que no ha hecho distinción de nacionalidades, pues somos de aquí, familia y en las familias no queremos ningún tipo de delincuencia», concluyendo con un contundente «hay que castigar».