El Jardín Romántico del Ayuntamiento de Utrera fue el lugar elegido por el Consejo Asesor del Año Cultural del Abate Marchena para presentar una excepcional programación de actividades culturales, que se desarrollarán a lo largo de los próximos meses para celebrar el 250 aniversario de este importante personaje histórico nacido en Utrera.
En palabras del regidor utrerano, el socialista José María Villalobos, lo que se pretende con esta celebración y con esta amplia programación de actividades es «hacer justicia histórica con el Abate, recuperarlo como uno de los grandes ilustrados andaluces y españoles, difundir su figura y reconocerle el lugar que se merece en la galería de personajes ilustres utreranos».
Por ello, según dijo, desde el Ayuntamiento de Utrera se ha diseñado con «tremenda ilusión y cariño» un programa de actos que abarca «todas las disciplinas de la creación y el arte», centradas en la figura del Abate Marchena y la época convulsa que le tocó vivir entre los años finales del siglo XVIII y primeros del XIX.
Se trata, según explicó, de un calendario de conmemoraciones que nace con «vocación de permanencia» y que pretende «ir más allá de lo efímero y meramente festivo para dejar un legado sólido que sea semilla de un nuevo horizonte cultural para Utrera». El encargado de presentar la programación fue el comisario del Año Cultural del Abate Marchena, Cristóbal Ortega, que calificó al personaje como «una de las mentes más prolíficas que ha dado Andalucía», destacando su «impresionante nivel cultural y su compromiso con la sociedad de la época». En este sentido dijo que el Abate Marchena fue «un personaje único, que vivió momentos históricos únicos y que nació en una ciudad única como Utrera».
De la variada y amplia programación cultural, que comenzará a desarrollarse tras la Semana Santa, Cristóbal Ortega destacó que «evocará la España del Siglo de las Luces» y tendrá, entre otras actividades, conciertos de música clásica y popular, una serie de conferencias, talleres para niños, el montaje de su obra clásica Polixena, un ciclo de artes escénicas, la elaboración de un cuadernillo didáctico y de un libro de relatos en torno al personaje, el I Concurso Nacional de Música de Cámara biográfico, la creación de un Jardín de la Ilustración y la reproducción del salón de Madame Staël, que aprovechará la tradición repostera de Utrera para recuperar la gastronomía de entonces.