El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, anunció ayer que se deberá modificar el proyecto de los túneles norte de la SE-40, de forma que espera que se puedan reanudar las obras para verano de 2018, mientras que en el caso de los túneles sur de esta infraestructuras, se deberá preparar un nuevo proyecto, para lo cual inicialmente se rescindirá el contrato actual y se volverá a licitar un nuevo proyecto.
De la Serna destacó que no ha visto «ningún proyecto con la complejidad administrativa y técnica» que tienen los túneles de la SE-40, que se encuentran en una situación «enormemente enrevesada, mezcla de lo estrictamente técnico, tanto en el diseño de los túneles, como en las prescripciones hidráulicas, consecuencia de la reformulación del calculo de los niveles de avenida del río, como la situación administrativa», lo que ha provocado que la obra lleve casi cinco años paralizada. No obstante, trasladó su «firme compromiso» para «tirar hacia adelante con esas actuaciones», que suman más de 700 millones de euros, y anunció que «se han tomado decisiones y las vamos a adoptar».
Sobre los túneles norte, con una inversión de 236 millones, y ejecutada al 14 por ciento, se va a iniciar un proyecto modificado «para incorporar una serie de cuestiones que hagan posible la actuación», donde «se cambie el diseño de los emboquilles del túnel, se ejecuten pantallas de impermeabilización de todo el recinto de excavación de acceso a los túneles, donde se adapten las estructuras». El ministro espera en febrero solicitar los informes correspondientes del proyecto modificado «para intentar llegar a verano de 2018» con la autorización de la modificación del redactado «y poder reanudar las obras en verano de 2018 en tramos donde podamos actuar, especialmente el enlace con Coria del Río». Mientras tanto hay que elaborar el proyecto modificado «para que en 2019 se pueda empezar con el inicio de los emboquilles, paso previo para trabajar con la tuneladora», explicó.
No correrán la misma suerte los dos túneles sur, que suponen 270 millones, y cuya obra está ejecutada al 11 por ciento, el ministro indicó que en ese caso «no es posible modificar el proyecto», pues «no entraríamos en los márgenes de la ley». En este caso, se optará por «rescindir el contrato actual, redactar una actualización del proyecto para incorporar las nuevas necesidades y relicitar la actuación con el nuevo proyecto actualizado».
De la Serna espera tener el estudio para resolver el contrato en marzo, para lo cual están redactando los pliegos del nuevo proyecto de terminación. Reconoció que esta actuación «llevará más tiempo y no se podrán comenzar las obras en verano, pues hay que volver a licitar en los términos necesarios con el nuevo proyecto».
El ministro, en cualquier caso, expresó su «compromiso de ejecución de las obras», por lo que «importa poco de dónde procede la financiación, pues las dos actuaciones se van a acometer con la mayor celeridad posible».
De la Serna hizo estas apreciaciones en un desayuno informativo en el Foro Joly, donde fue presentado por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que valoró su gestión «en momentos de crisis», así como su «rigor y capacidad de resolución». En el acto también estuvieron presentes el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, y dirigentes del PP como Javier Arenas o Juanma Moreno.