Actualizado: 07 dic 2022 / 19:57
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Las tan esperadas lluvias han llegado a Castilblanco de los Arroyos con una vertiente negativa. A causa de las caídas y las que se prevé que van a caer, la hermandad matriz de San Benito ha decidido cancelar la representación del Belén viviente, previsto para este fin de semana y a celebrar en las inmediaciones de la ermita del Patrón.
Según ha expresado la hermandad en un comunicado emitido este miércoles, atendiendo a “las predicciones meteorológicas que disponemos en estos momentos” y por acuerdo tanto de la Junta de Gobierno como del grupo joven y la comisión organizadora, “se ha decidido suspender la representación del Nacimiento en la Ermita de San Benito”.
La hermandad no puede garantizar el bienestar de los participantes y la seguridad de los visitantes
Al recinto – en plena sierra – se accede por un único camino de tierra, y en el que se complica el tránsito con la meteorología actual. Es por ello que no han sido solamente las previsiones adversas las que han determinado la suspensión. Según ha destacado la hermandad, “el patrimonio más importante son nuestros hermanos y todos los participantes que nos acompañan en esta preciosa aventura, y dadas las circunstancias no podemos garantizar su bienestar en un terreno empapado, ni la seguridad de los visitantes por el estado del camino”.
Actores y figurantes de la pasada edición ante el Patrón de Castilblanco en su ermita (Foto: Hermandad matriz de San Benito)
La hermandad, que devolverá el importe de las entradas adquiridas, concluye el comunicado señalando que “hemos rogado mucho a San Benito Bendito por el tan valioso don de la lluvia, por lo que en estos momentos no podemos más que agradecer su intercesión”.
La de este año hubiera sido la segunda edición
‘El Niño de Dios nace en San Benito’ es el título de la representación del nacimiento de Jesucristo que la hermandad matriz, a través de su grupo joven, estrenó el pasado año en el entorno de la ermita del Patrón de Castilblanco de los Arroyos. Según explicaba la hermandad, “en un paraje de extraordinaria belleza, este Belén Viviente guiará a los visitantes por los acontecimientos más reseñables de las Sagradas Escrituras”.
Para ello, en pases guiados de unos 30 minutos de duración, el espectador hacía un recorrido entre la dehesa y el monte bajo que rodean a la ermita, contemplando “desde la Anunciación al Nacimiento de Jesús, pasando por la visita de la Virgen a su prima Isabel, la aparición del ángel a los pastorcitos y la adoración de los Reyes Magos, entre otras escenas típicas de la Judea del Rey Herodes”.
Para esta segunda edición se presentaban como novedades “la ampliación del recorrido y el número de figurantes”. Sin embargo, los castilblanqueños tendrán que esperar a 2023 para volver a ver al Niño Jesús nacer sambenitero.
