Actualizado: 07 jul 2022 / 04:00
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Los primeros pasos futbolísticos del jugador del Almería Alejandro Pozo los dio en el campo de fútbol de su pueblo, Huévar del Aljarafe. Desde ayer, ese estadio lleva su nombre, mediante la gestión realizada por el Ayuntamiento desde que se dio el visto bueno a la idea en 2019, para reformar las instalaciones, dotarlas de nuevo césped y ahora estar presidida su entrada por una enorme placa que acredita la relación del jugador con sus raíces.
Un acto sencillo y emotivo en el que la alcaldesa, María Eugenia Moreno, ha destacado la trayectoria de un chaval que, con solo 23 años, siempre lleva a su pueblo por bandera, y que en su día cumplió su sueño de jugar en el Sevilla FC.
Nacido en el municipio sevillano el 22 de febrero de 1999, se formó en la cantera del Sevilla, donde fue titular en el División de Honor Juvenil en su primer año en la categoría y en 2017 fue internacional con la selección sub-19 dirigida por Luis de la Fuente.
Ha pasado por el Granada, Mallorca y Éibar hasta llegar al Almería, que ejerció su derecho a compra tras el ascenso a Primera, con un contrato que le vincula con este club hasta 2027.
Confiado en la nueva liga
El defensa del Almería se ha mostrado muy confiado en el buen papel que su equipo puede hacer este año en su regreso a Primera División, y confía en “seguir creciendo y que ojalá me salga un buen año”. Pozo ha entendido que “si la temporada sale bien colectivamente, también me saldrá individualmente”, para enfatizar que “ojalá sea igual que el anterior”.
“Ojalá siga contando para el míster”, ha dicho, para expresar también que tiene “muchas ganas de jugar en Primera División con el Almería, que llevaba muchos años sin poder estar ahí”.
Placa descubierta
Tras descubrir la placa del estadio junto a la alcaldesa de la localidad, María Eugenia Moreno, y la presidenta del equipo de fútbol local, Encarnación Ramírez, ha dicho que el hecho de que el estadio lleve su nombre “es un orgullo, porque me reconoce la trayectoria en el campo en el que di mis primeros pasos”.
María Eugenia Moreno se ha mostrado especialmente agradecida con el jugador por el detalle de hace algún tiempo de regalarse una camiseta a una de sus sobrinas.
Alejandro ha recordado que el terreno de juego cuenta ahora con un mejor césped que cuando él comenzó a jugar, para alegrarse de que “todo lo bueno que le pase a los niños del pueblo”, porque “también se lo merecen”.
Al campo se le ha dado el nombre de Alejandro Pozo tras haber sido reformado con varias actuaciones, entre otras el cambio del césped.
Un saque de honor del homenajeado y una foto de familia con la cantera del club han servido para cerrar el acto.
