Lebrija ya tiene lo primordial para su futura vía verde: el terreno. Se lo acaba de ceder Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), dependiente del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, a través de un acuerdo firmado con su Ayuntamiento la pasada semana y que pone a disposición del municipio dos tramos de suelo no urbanizable de casi diez kilómetros de longitud y 368.660 metros cuadrados. Este terreno era el de dos tramos cerrados de la línea Sevilla-Cádiz desde que se puso en funcionamiento la actual estación de viajeros lebrijana y se creó un trazado ferroviario alternativo.
Gracias a este convenio, el Ayuntamiento lebrijano recibe los terrenos como entidad promotora del Proyecto Vía Verde de Lebrija con el objetivo de aflorar recursos endógenos en la provincia y promocionar proyectos generadores de empleo, poniendo en valor y uso una infraestructura de carácter ferroviario que ya no tiene la función para que la fue concebida. Así ha ocurrido, en toda España, con hasta 127 tramos de este tipo convertidos en vías verdes, un total de 1.705 kilómetros hasta ahora.
La participación de Adif en este proyecto se enmarca en la estrategia empresarial de la propia compañía, basada en su responsabilidad ante la sociedad como entidad pública y alineada con la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 de la ONU. De este modo, Adif, como titular de estas infraestructuras en desuso, potencia la creación de itinerarios accesibles y seguros e impulsa la reutilización de antiguos trazados ferroviarios para promover el desarrollo local, pues estas vías verdes producen empleos directos e indirectos en zonas rurales, generándose incluso un nuevo tejido comercial vinculado al turismo.
La duración del contrato es de 20 años contados desde el día de su firma, aunque por acuerdo de ambas partes podrá prorrogarse diez años más. Por otro lado, se acuerda un plazo máximo de cuatro años, a partir de ahora, para la ejecución de las obras de adecuación que permitan la puesta en marcha de la vía verde.