No es, ni mucho menos, la primera vez que los alcaldes del Bajo Guadalquivir han exigido a la Junta de Andalucía que mejore sus servicios sanitarios en la Atención Primaria, pues desde la irrupción de la crisis del coronavirus es una de las prestaciones que más quejas acumula por parte de la ciudadanía, harta de llamar por teléfono para conseguir una cita, de que sus médicos de cabecera atiendan telefónicamente y de que, en el caso de conseguir una cita con el facultativo después de hacer colas de “dos o tres horas”, se las den para dentro de 15 o 20 días. Hace muchos meses que este panorama es el pan de cada día en los centro de salud de toda la comarca. Pero esta mañana se han unido para decirlo públicamente dos regidores vecinos, el de Lebrija, Pepe Barroso, y el de El Cuervo, Francisco José Martínez, ambos socialistas.
“No es tolerable que los más de 52.000 habitantes del centro de referencia del Hospital de Lebrija tengan que realizar largas colas de hasta tres horas para conseguir cita con su facultativo”, ha dicho Barroso esta mañana. “A través de la web Clicsalud o de la aplicación Salud Responde es prácticamente imposible reservar cita, ya que las agendas sanitarias, en la mayoría de los casos, no están abiertas como consecuencia de la falta de disponibilidad”, han confirmado los dos alcaldes, haciéndose eco así de lo que los ciudadanos llevan todo el verano denunciando para nada en las redes sociales.
Plantillas a la mitad
Aunque Barroso y Martínez han reconocido que los médicos hacen lo que pueden, y que “están desbordados en muchas ocasiones por falta de personal”, el regidor lebrijano ha señalado que, en el caso de su municipio, cuenta en la actualidad con una plantilla que oscila entre los 6 y los 10 facultativos de un total de 15 profesionales que deberían estar. En este sentido, ambos regidores exigen que “se cubran todas las vacantes existentes en los citados centros de salud, ya sean por traslados de facultativos o por bajas laborales”.
“La situación se prolonga ya demasiado en el tiempo”, se han quejado los dos alcaldes, que han asegurado que “está causando graves problemas a la población”, por lo que la Junta de Andalucía, que es la administración competente, “debe buscar soluciones de manera urgente e inmediata”. Según los dos alcaldes, todas estas circunstancias han sido trasladadas “en reiteradas ocasiones” tanto a la delegada provincial de Salud, Regina Serrano, como al propio consejero, Jesús Aguirre, pero ambos han hecho caso omiso hasta el momento. Por eso piden ahora una “reunión con el consejero para abordar los asuntos planteados y colaborar en la búsqueda de una solución que evite más perjuicios a la ciudadanía, que se merece un servicio de calidad que los proteja en los momentos en que más lo necesitan”.