Recomponer cuanto antes la imagen exterior de la ciudad a través de una doble estrategia: la transparencia en la investigación y transmisión de los hechos y la firme actuación de las administraciones y del propio Consejo de Cofradías para hacer de la Madrugá una jornada menos vulnerable. El sector turístico de la ciudad admite que los incidentes de la Madrugá sevillana «no constituyen una buena noticia» para la proyección exterior de Sevilla e inciden en la «reiteración» de estos tumultos desde que en el año 2000 ocurrieran las primeras carreritas.
Pero, ¿en qué medida pueden afectar estos hechos al sector turístico y a futuras campañas? El gerente de los hoteleros de Sevilla, Santiado Padilla, admite que lo ocurrido en las primeras horas de la madrugada del Viernes Santo «es algo que ha tenido un recorrido muy importante en los medios de comunicación», lo que «no es una buena noticia ni contribuye a proyectar una buena imagen al exterior».
Con todo, asegura que «la posible afección negativa de estos hechos es algo que está por verse» y aplaude la rápida reacción de las autoridades y del propio Consejo de Cofradías a la hora de afrontar con firmeza y determinación un posible replanteamiento de la seguridad en la jornada cimera de la Semana Santa sevillana. «Creo que las medidas que están tomando en caliente tanto el Ayuntamiento como el Consejo de Cofradías vienen a atenuar el efecto negativo que esto pueda tener a futuro. Por otra parte, el hecho de que se confirme que los tumultos no han tenido un origen organizado contribuye a distender y a atenuar este posible efecto negativo».
Padilla asegura que sucesos como los de la Madrugá «dan la oportunidad a nuestros rivales a que saquen tajada de estos errores». «Los mercados son muy competitivos. Son muchos los destinos que aspiran a funcionar como lo hace Sevilla en Semana Santa y con sucesos como los vividos le estamos dando opciones a nuestros enemigos para que puedan utilizar una imagen de la Madrugá con el fin de tirar por tierra nuestro prestigio».
El presidente de la Asociación Empresarial de Agencias de Viajes de Sevilla, José Manuel Lastra, también reconoce el «efecto negativo» que sucesos como los ocurridos tienen sobre la imagen de la ciudad por la «extraodinaria dimensión de la que goza a nivel nacional e internacional una fiesta como la Semana Santa de Sevilla». «Durante varios días hemos sido portada de los noticieros a nivel nacional y en muchos internacionales». Lastra pide que los organismos públicos encargados de la promoción exterior de la ciudad insten a los medios de comunicación a ponderar también el «buen funcionamiento de la Semana Santa en parámetros como el aumento de la ocupación hotelera y número de visitantes y, aislando los sucesos de la Madrugá, la ausencia casi general de incidencias reseñables».