El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Sevilla, Daniel González Rojas, ha recriminado este martes al gobierno de Juan Espadas (PSOE) que “siga mirando a la izquierda para intentar aprobar sus presupuestos, mientras continúa subvirtiendo el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), de la mano de la derecha, para hacer caja con lo público y convertir a la ciudad en un parque temático para turistas”, aclara en una nota de prensa.
Rojas ha realizado estas declaraciones durante la presentación de las alegaciones interpuestas por Izquierda Unida a la modificación del PGOU promovida por el gobierno del PSOE para recalificar la antigua comisaría de la Gavidia y privatizar este enclave, dando así la espalda al interés general, al vecindario del Casco Antiguo y a la memoria democrática.
A las puertas de este histórico edificio, el portavoz de IU ha defendido que “hay alternativa para la Gavidia, más allá de la especulación y el pelotazo urbanístico”. Asimismo, Rojas se ha mostrado convencido de que, con independencia de la suerte que corran las alegaciones de su grupo político, “Sevilla tendrá, a partir del 26 mayo, un gobierno de izquierdas que renunciará a esta recalificación, pactada por el PSOE con el PP, y garantizará un equipamiento público y social que dé respuesta a las necesidades de la población del Casco Antiguo”.
En este marco, el portavoz de IU y candidato a la confluencia en Adelante Sevilla ha explicado que las alegaciones de su formación política “son el fruto de un trabajo colectivo desarrollado conjuntamente con personas y entidades sociales que no se resignan a que Sevilla pierda este emblemático espacio”, destacando entre ellas la Plataforma ciudadana por una Gavidia pública o la asociación de arquitectos Entre Adoquines.
En sus alegaciones, IU recuerda que la modificación del PGOU impulsada por Espadas para que el edificio admita usos terciarios supone un claro incumplimiento de la moción aprobada en 2015 por el Pleno del Ayuntamiento para “garantizar su calificación como Servicios de Interés Público y Social (SIPS) en su categoría de Socio-Cultural”, que es la que la formación de izquierdas sigue considerando más adecuada para este equipamiento.
Además, desde Izquierda Unida recalcan en sus alegaciones que la única forma de lograr que esta antigua comisaría, donde se torturó y reprimió a centenares de luchadores antifranquistas, albergue un Lugar de Memoria Democrático digno, pasaría por garantizar el uso público y social del edificio, alejándolo de intereses privados.