Actualizado: 01 abr 2022 / 18:03
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La tradición teatral en cualquier colegio salesiano es muy grande. El fundador de la congregación, San Juan Bosco, animaba a sus alumnos a cultivar la afición por este arte durante el tiempo que permanecían en sus talleres y escuelas como una herramienta más de su sistema educativo: el Sistema Preventivo. Es decir, lo que hoy en día los modernos llaman proactividad. Es difícil encontrar un centro salesiano en el que no exista un grupo de teatro: de alumnos, de profesores, de antiguos alumnos.
Así ocurre en el gran colegio de los Salesianos de la Trinidad, con casi 130 años de historia y medalla de oro de la ciudad. El Grupo Teatral Farándula Don Bosco de la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos de este centro educativo es un vivo ejemplo de ello. La historia cuenta que un 24 de junio de 1916 tiene lugar el debut de la compañía “cómico-dramática juvenil” en el teatro de variedades de San Juan de Aznalfarache, iniciándose así un recorrido que llega de manera casi ininterrumpida hasta nuestros días. Son muchas las representación que realizan anualmente entre las que se intercalan uno o dos estrenos y la reposición cada Cuaresma de La Pasión, drama sacro que recoge la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús.
En este sentido, y con motivo del Centenario del grupo de teatro, decidieron realizar un nuevo montaje que actualizara la dramatización tradicional de las pasiones que se representan en multitud de lugares. Con texto del salesiano, escritor y teólogo José Miguel Núñez y un nuevo concepto escénico, AGNUS DEI (La Pasión) pretende ser además de una puesta al día de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús, una experiencia teatral personal y emocionante que sorprenda e interpele a quien la contempla. Se trata de un montaje escenográfico sobrio, donde la luz, los claro-oscuros y el acompañamiento musical invitan al espectador a meterse de lleno en la historia que todos conocemos.
Contada con frescura y cercanía al espectador, la historia intenta, según el autor, “ser fiel al espesor histórico de los acontecimientos, se propone bucear en los motivos que provocaron el conflicto que llevó a Jesús a ser condenado a muerte; y pone de relieve que la Pasión y la Muerte de Jesús no tienen sentido alguno si prescindimos de la óptica de la Resurrección”, afirma Núñez.
Esta centenaria asociación de Antiguos Alumnos de Don Bosco (20/04/1902) colabora mediante su actividad teatral con iniciativas salesianas como la Casa Salesiana Bartolomé Blanco, entidad que acoge a jóvenes inmigrantes que son expulsados de los centros de menores al cumplir 18 años mediante una acogida directa en la misma comunidad. Asimismo, este carácter social tiene la vertiente escolar con el proyecto APRES, que ofrece apoyo psicosocial a menores para favorecer la superación de las situaciones de fracaso social y personal es otra de las realidades a las que destina sus esfuerzos.
Serán dos las funciones que se celebren en el Teatro María Auxiliadora del Colegio Salesiano de la Santísima Trinidad (c/ María Auxiliadora, 18E) los días 1 y 2 de abril, a las 20:00h.
Entradas numeradas:
■ Anticipada (10,00€) giglon.com y La Teatral (c/ Velázquez 12) - Grupos (8,00€ / mínimo 10 personas)
■ Taquilla en día de la función (12,00€)
Una asociación llena de vida
La Asociación de Antiguos Alumnos de la Trinidad está formada actualmente por unos 250 socios, la mayoría exalumnos de la Casa de la Trinidad aunque también, y en buena medida, por simpatizantes que, a través de las actividades que se realizan, se incorporan a la nómina de asociados. El teatro es una de ellas, seguramente la principal, pero no la única: talleres de manualidades, momentos de formación, Caseta de Feria, excursiones culturales, salidas recreativas y momentos de devoción a María Auxiliadora y Don Bosco en nuestra Casa de la Trinidad.
Para Fernando Claros, presidente de la actual directiva, volver a la actividad, tras dos años, ha sido un reto ilusionante: “La pandemia, como a todos, nos paralizó. El teatro y todas las actividades se suspendieron. Antes de aquel 13 de marzo de 2020 en el que nos confinaron, ya habíamos suspendido una representación de AGNUS DEI en Utrera y dos en Sevilla, o una charla-exposición del pintor Andrés Torrejón y del restaurador Luis Maqueda”, afirma.
Con intentos de retomar actividades durante los periodos en los que los índices COVID eran más favorables no ha sido hasta principios de septiembre de 2021 en los que con cierta normalidad se ha retomado ensayos, taller (de Belenes), visita del cartero real, encuentro regional de jóvenes, retiros... Incluso, indica Claros, “pudimos realizar seis representaciones del musical Mamma Mía! o dos de la comedia clásica Miles Gloriosus de Plauto a la que habíamos tenido que meter en el congelador, y con éxito de público”, indica.
Sin abandonar las medidas sanitarias, “ahora estamos más contentos. El aforo de nuestras actividades se normaliza, los socios participan con más alegría y se hacen cada vez más presentes; hemos dejado atrás la batería de pruebas sanitarias que nos hacíamos antes de cada ensayo o reunión, el público llena el patio de butacas, andamos ultimando los preparativos de nuestro próximo estreno: 8 mujeres de Robert Thomas, deseando celebrar el Triduo Pascual y nuestra Fiesta de la Unión o vernos en la Caseta “Los de Don Bosco””, concluye.
