El delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera, ha hecho balance este miércoles de la evolución de la Feria de Abril 2018, que ha llegado a su ecuador y que ha cerrado su mejor jornada el martes con una línea ascendente en la afluencia que previsiblemente se mantendrá esta jornada al ser festivo local.
Pese a esta mayor asistencia de público, todo el dispositivo ha transcurrido sin incidentes de gravedad, con una reducción de los botellones dentro y fuera del Real y con un dispositivo específico puesto en marcha contra la venta ambulante ilegal que dio ayer nuevos frutos.
En este sentido, este martes se reforzó el dispositivo de Policía Local, Policía Nacional y Unidad Adscrita contra la venta ilegal y cualquier actuación que ponga en riesgo la salud de la población, especialmente de los menores. La Policía Local realizó 23 intervenciones contra la venta ambulante ilegal y el dispositivo conjunto neutralizó 30 puestos y seis vehículos que abastecían a los distintos puntos.
Se desmanteló por completo una red procedente de otros puntos de Andalucía que distribuía alcohol sin medidas de control y de forma ilegal. El dispositivo permitió también detectar en los alrededores de la Feria dos establecimientos que vendían alcohol a menores y en los que se actuó de forma inmediata con las correspondientes actuaciones disciplinarias.
Además, se incautaron 36 kilos de pescado, 145 unidades de pan y pastelería, 240 kilos de frutas y hortalizas y 63 artículos de regalo falsificados.
«Estamos tratando de erradicar y de tomar medidas severas y contundentes ante una situación que se viene produciendo desde hace demasiado tiempo en la Feria con la venta ilegal, que supone un riesgo para la salud de las personas», dice Cabrera.
Además de la labor policial, es esencial la concienciación y sensibilización ciudadana, «y por eso hacemos un llamamiento a no consumir este tipo de productos y bebidas que se intentan distribuir de forma ilegal en el recinto ferial», ha manifestado el delegado.
El actual gobierno municipal tomó la decisión de que todas las ediciones de la Feria debían tener un día festivo que en este año se propuso que fuera el miércoles --tras cambiarlo por el día de San Fernando--, «y se ha demostrado la enorme respuesta que tiene esta medida entre la población», según explica.