El presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), Miguel Rus, asegura que la obligación del sector es estar preparados ante una hipotética suspensión de las procesiones en Semana Santa por el coronavirus, aunque ha pedido que se eviten los alarmismos por este asunto.
Ayer, antes de su intervención en la sede de Prodetur en Sevilla en el encuentro ‘Los Retos de la Pequeña y Mediana Industria’, organizado por la revista Andalucía Económica, Rus sostuvo que nadie en el sector empresarial se plantea una suspensión de la Semana Santa, con lo que "esperamos que no sea una situación a la que tengamos que llegar”.
No obstante, entendió que "lo primero son las personas, y hay que seguir las normativas sanitarias, y ver las circunstancias que se van dando en las próximas semanas, y por la zona en la que estamos, por el calor que va a hacer en las próximas semanas, y por cómo está desarrollándose la situación, entendemos que para esas fechas -las de la Semana Santa- puede estar todo más claro”.
“Los empresarios estamos acostumbrados a contemplar todos los escenarios y nuestra obligación es estar preparados. Sería una decisión que haría mucho daños a todos, pero entendemos que lo primero es la salud de las personas, aunque se está generando un alarmismo exagerado e innecesario”, explicó.
En este punto, una reflexión; “No tiene sentido que haya un Sevilla-Roma sin público” y los aficionados italianos están concentrados en los bares, de modo que “hay que seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, porque tenemos de los mejores sistemas de salud del mundo, estar tranquilos, y sin alarmismos innecesarios y siendo realistas con los casos, las situaciones, y los sectores reales de riesgo”.