Una llamada al 092 alertaba sobre la posible venta de alcohol a menores en un bar situado en la calle Montecarmelo de la capital, en cuyo interior y en la calle se agrupaban numerosos menores de edad.
Tras el aviso, agentes de la Unidad Línea Verde accedieron de paisano al interior del establecimiento y pudieron observar cómo el camarero servía bebidas alcohólicas a menores de edad, cuyas edades serían confirmadas posteriormente.
Ya con el apoyo de dotaciones uniformadas de Policía Local se procedió al desalojo y precinto del establecimiento.