El servicio de Dermatología del hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla impartió en la tarde de ayer una charla sobre el melanoma al colectivo de afectados por la retinosis pigmentaria, un tipo de ceguera, y a sus familiares. Esta acción se enmarca dentro de la semana del Euromelanoma.
Las dermatólogas Carolina Vila y Amalia Pérez Gil, explicaron a los asistentes las distintas clases de lunares y como distinguir uno maligno de uno benigno, según sus características, color, forma, etc. Asimismo, se estableció un coloquio con los asistentes que pudieron plantear sus dudas a las especialistas. Al finalizar la charla se revisaron los lunares a todos los asistentes que lo solicitaron.
La retinosis pigmentaria es un tipo de ceguera, por tanto, los afectados no pueden revisarse por si mismos lo lunares, explica la dermatóloga Carolina Vila, por este motivo, este año hemos centrado nuestra acción de sensibilización en este colectivo y sus familiares, para que sean sus ojos y sepan cómo deben revisarles los lunares para que en caso de detectar alguno sospechoso, acudan a un especialista”.
Durante esta semana se están llevando a cabo consultas gratuitas en los hospitales Quirónsalud de Sevilla a los pacientes que hayan pedido cita previa en la web ‘www.euromelanoma.org’.
La jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, Amalia Pérez Gil, incide en la importancia de observarse y explorarse la piel con "cierta asiduidad". "En las zonas donde uno no llega --espalda y cuero cabelludo—debemos pedir a un familiar o allegado que nos ayude y, si hay algún elemento sospechoso --de reciente aparición o que haya cambio de color, forma o tamaño--, hay que acudir siempre al especialista", asevera.
En este sentido, la dermatóloga Carolina Vila señala que el cáncer de piel es "el más fácil de curar, siempre que se diagnostique y se trate a tiempo" por eso, "es fundamental que conozca los signos del cáncer de piel". "Existe la regla del ‘ABCDE’ para detectar un posible melanoma cutáneo. A, asimetría de la lesión; B, bordes irregulares; C, varios colores; D, diámetro mayor de cinco milímetros y E, evolución ", explica.
"Es recomendable que las autoexploraciones se lleven a cabo con cierta asiduidad", afirma la especialista, quien apunta que puede ser de bastante utilidad realizarse un reportaje fotográfico de toda la piel al inicio para poder constatar los eventuales cambios que pueden aparecer con el tiempo.
Si se tiene cualquiera de los factores de riesgo, o identifica cualquier cambio o lesión sospechosa, debería acudir a un dermatólogo para que lo evalúe y probablemente le recomiende cuál es el mejor seguimiento dermatológico según su nivel de riesgo.
Así, Pérez Gil destaca que el melanoma se cura cuando se diagnostica en estadios iniciales y "afortunadamente es el tumor más accesible al reconocimiento". Por ello, "hay que enfatizar, más en esta época en la que entramos, en lo importante que es la protección solar y evitar las quemaduras solares sobre todo en los niños".