La Guardia Civil ha detenido a un varón de 40 años de edad que distribuía tabaco de contrabando camuflado en cajas y bolsas con serigrafía de pan de molde, para esquivar las restricciones a los desplazamientos del estado de alarma, interviniendo además un almacén clandestino de dicha persona donde había acopiados más de 1.200 kilogramos de picadura de tabaco.
La operación se inició el pasado mes de marzo, cuando la Guardia Civil tuvo sospechas de que una persona podría estar aprovechando la entrada en vigor del estado de alarma implantado para frenar la pandemia de coronavirus Covid-19, para distribuir tabaco de contrabando por distinta localidades de Sevilla, haciéndose pasar por panadero, pues el estado de alarma prohíbe los desplazamientos salvo por causas laborales o para la adquisición de alimentos y productos básicos.
De esta forma, el detenido pretendía eludir los controles policiales acometidos por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para vigilar las restricciones del estado de alarma, al ser el pan un producto de primera necesidad y ser por ello permitido su transporte y venta al público. Así, el sujeto se servía de cajas y embalajes de pan de molde para ocultar el tabaco que transportaba.
Fruto de las investigaciones, los agentes pudieron determinar que esta persona actuaba en los horarios típicos de apertura de panificadoras y empresas de reparto de pan, para distribuir tabaco por diferentes localidades de la provincia de Sevilla, usando una furgoneta de transporte de productos de alimentación y amparado por documentación como trabajador autónomo y transportista.