El matador de toros sevillano Francisco Lama de Góngora y el ganadero y empresario onubense Guillermo García Palacios se han vinculado profesionalmente. García Palacios se ocupará de los asuntos profesionales del torero tanto en la temporada americana como en la próxima campaña europea.
Este nuevo vínculo profesional nace de la buena sintonía personal de ambos, que se remonta a los tiempos de novillero del joven diestro del Arenal. Lama asegura que recurrió a Guillermo en busca de consejos para su carrera en numerosas ocasiones. De este lazo de amistad, afirma el propio matador, surge ahora un apoderamiento que han sellado sin contrato, con el clásico apretón de manos, y al que no han puesto fecha de caducidad.
La intención de torero y apoderado es hacer una campaña en América que tenga el suficiente eco y más tarde ser tenidos en cuenta en la temporada española y francesa. En este sentido, está previsto que Lama de Góngora toree en plazas destacadas de la temporada mexicana, para lo que cuenta con el apoyo de la empresa Casa Toreros, comandada por Juan Pablo Corona, estrechamente vinculado a García Palacios.
Lama de Góngora lleva dos años toreando en país azteca, en el que aterrizó ante la falta de contratos en España. El torero sevillano, que quedó prácticamente parado a raíz de su alternativa, tomó esta decisión trascendental para mantener el ritmo de sus actuaciones y continuar viviendo en torero en espera de una definitiva oportunidad en su tierra.