El Cristo de las Cinco Llagas, atravesó el dintel de la Basílica de María Auxiliadora a las 17:40, precedido por más de 300 hermanos de la cofradía de la Trinidad. Una hora después llegaba a la plaza de San Julián, para enfilar la calle Enladrillada y llegar a la Catedral vía Doña María Coronel, Alfalfa y Argote de Molina.
Numeroso público se agolpaba a la salida del arco del colegio salesiano, viendo pasar la imagen que Luis Álvarez Duarte tallara hace ya 14 años. Se da la circunstancia de que el imaginero sevillano será el segundo autor en ver una de sus obras presidiendo el Viacrucis de las Cofradías.
Una vez en la Catedral, cada una de las catorce estaciones del Viacrucis estará señalizada por otras tantas cruces de guía de las siguientes hermandades: la Milagrosa (Capilla de los Evangelios); Bellavista (Capilla de las Doncellas); Jesús Despojado (Altar del Jubileo); San Roque (Capilla de San Francisco); San Gonzalo (Capilla de Santiago); El Museo (Capilla de Scala); la Candelaria (Capilla de San Antonio); Siete Palabras (Capilla de San Leandro); La Sed (Puerta de la Asunción); Quinta Angustia (Capilla de San Isidoro); El Valle (Capilla de Santa Ana); El Calvario (Capilla de San José); Esperanza de Triana (Capilla de San Hermenegildo); y La Carretería (Capilla Virgen de la Antigua).