Especies en extinción

27 abr 2017 / 23:26 h - Actualizado: 27 abr 2017 / 23:26 h.
"Iba por Canalejas"

Hubo un tiempo en el que las formas eran casi igual de importantes que el fin que perseguían. Lo de que «el fin justifica los medios» de Maquiavelo era tan incierto que ni era de Maquiavelo, sino de Napoleón, anotado a mano en un libro de Maquiavelo.

Se perdieron las formas y, en consecuencia, tenemos una sociedad amorfa. Y esta falta de respeto y buena educación, hacen que fines que son totalmente respetables se conviertan en el aparato reproductor de La Bernarda cuando se pierden las formas.

Ser anti taurino, por ejemplo, es tan lícito como ser taurino. El problema sobreviene cuando se trata de imponer la anti taurinidad a golpe de insulto al que le gustan los toros, legales, por otra parte.

Querer independizarse de España es tan lícito como sentirse una versión patria del Capitán América, con uniforme rojigualda, pero no puede hacerse saltándose la ley a la torera. Eso sí, que nadie se salte sus leyes, que serán castigados. Son solo dos ejemplos.

Las formas, esa especie en extinción. A mi casi medio siglo contemplo con pavor como nuestro país ha retrocedido de manera bárbara en tolerancia y respeto por las ideas del otro. Gente disfrazada de demócrata capaz de darle una ostia a otro si no comparte sus ideas. Al Capones de patio de vecinos que llevan a su máxima expresión esa cita del gánster que decía que «se consigue mucho más con palabras amables y una pistola que solo con palabras amables».

El fin no justifica los medios, pero los medios pueden llevarnos al fin.