Estar en otro mundo o en Google

Dice Ismael Marinero en El Español que como cada año Google, ha revelado cuáles han sido los temas más buscados entre los usuarios de España. Y sigue la tendencia: la mayoría de temas y personajes más buscados por los usuarios están relacionados con temas de actualidad, eventos deportivos, la industria del entretenimiento y algún que otro suceso extraordinario. Entre lo más destacado de la 'cosecha de 2022', el buscador de Google (el más utilizado del mundo), sorprende el primer puesto para Wordle, el adictivo juego que te reta a adivinar una palabra cada día y fue viral en Twitter y Facebook. De hecho, ha tenido tanto éxito que han surgido variantes como el diseñado para los amantes del cine o el de los locos de la geografía, que te desafía a adivinar países. Entre las consultas tecnológicas, la más repetida ha sido iOs 16 cuando sale.

Sin duda, el tema de actualidad que más consultas ha recibido tiene que ver con todo lo que está ocurriendo en Ucrania, desde que Rusia inició su invasión a finales de febrero. Entre las primeras posiciones también se cuelan la muerte de Isabel II, personajes como Tamara Falcó, el bofetón de Will Smith a Chris Rock en los Oscar (también entre lo más visto en YouTube) o el precio de la luz, que repite como una de las grandes preocupaciones de la población española.

El interés sobre el coronavirus ha decaído considerablemente, y sólo se cuela entre los primeros puestos los síntomas de la variante ómicron y consultas sobre cómo hacerse las pruebas de antígenos. Entre los temas que han sido tendencia sí ha recibido gran atención otra de las cuestiones de salud más impactantes del año: los casos de viruela del mono.

2022 ha estado marcado por dos grandes acontecimientos deportivos para los españoles: el Mundial de Qatar y el Eurobasket. Pese a todo, desde Google explican que la lista de deportistas cuyas búsquedas más han crecido en España corresponden a dos tenistas: Rafa Nadal y Carlos Alcaraz, que ha tenido un año triunfal y se ha colocado como número 1 del mundo.

Por otro lado, en relación con los programas y series de entretenimiento que más se han buscado el Top 1 lo ocupa Secret Story, en segunda posición repite Supervivientes y en tercer lugar está Uncharted, la adaptación al cine de la popular saga de videojuegos. Otros de los protagonistas del año han sido Dahmer, la serie de Netflix, la película de terror Smile o el regreso de Pasión de gavilanes.

Me hallo anonadado desde que leí la información de Marinero. Salvo Ucrania e Isabel II, no me he interesado por ni uno solo de los espacios y elementos que la mayor parte del personal busca por el nuevo Oráculo de Delfos, como mucho de oídas y algunos de verlos y retirarlos de inmediato de mi vista. Menuda tarea tengo por delante, en febrero comienzo a dar mis clases en la universidad y supongo que mis alumnos conocerán todas esas maravillas y yo entonces deberé hacer lo propio. Vivo en otro mundo y me veo obligado a trasladarme al de Google que debe ser el de verdad porque tanta gente no puede equivocarse, el errado y errante debo ser yo. Como tengo que explicar la evolución del poder y sus conexiones con la comunicación he estado leyendo libros al respecto, tesis doctorales, artículos, mucha prensa de calidad -que aún queda-, incluso la de poca calidad; he visto y escuchado en YouTube documentales y clases magistrales sobre Historia, Filosofía, Economía, Neurociencia, Física Cuántica, impartidas por destacados profesores. Entrevistas y conferencias de gente que sabe... Y ahora me encuentro con que estoy fuera de onda. ¡Qué va a ser de mí! Porque a mis alumnos suele importarles bien poco mi mundo, por regla general. Pertenecen a lo que llamo sociedad juguetona, lo mío les parece inservible a no pocos. Claro que yo les voy a decir lo que Javier Cámara a sus alumnos según confesó en la película Vivir es fácil con los ojos cerrados: si os creéis que el latín no sirve para nada tampoco sirven para nada vuestros abuelos y sin embargo sin ellos vosotros no estaríais en el mundo.

Aun así, me interesaré por todo eso que la gente demanda a Google, mi madre me decía siempre: “Hijo, tú no te señales”.