Viéndolas venir

Las ‘caenas’ siguen viviendo, a cuerpo de rey

Image
Álvaro Romero @aromerobernal1
22 may 2022 / 09:47 h - Actualizado: 22 may 2022 / 09:48 h.
"Viéndolas venir"
  • E.P
    E.P

Más allá de cualquier debate -legítimo- sobre el sistema político de nuestro país, el esperpento de ese señor que un día fue rey y ahora es una parodia de todo lo que hubieran podido imaginar sus adversarios pone en jaque injustamente a una Corona a la que habían empezado a dejar en paz para otros cuantos años. Valle-Inclán retrató a este tipo de personajes, y hasta Torrente lo ha actualizado hace nada en la gran pantalla. Pero que, a pesar de Fernando VII y sus guerras carlistas, a pesar de Berlanga, de Azcona, del teatro del absurdo y de nuestra presunta madurez democrática, el personaje se pasee por España entre halagos y reverencias como si no hubiera disparado jamás, ni siquiera en el pie de su hijo, lo dice todo de la nación que seguimos mereciendo ser.

Desde los elefantes abatidos de Botsuana, el monarca campechano parecía haber caído en desgracia, pero acabó sorprendiendo a todo el país con la evidencia de que aquella galantería de safari era simple y llanamente caza menor, pues ya para entonces manejaba armas de más altos vuelos. De modo que el contraste entre lo que creíamos deberle por habernos permitido la Transición y lo que él mismo se ha cobrado por su cuenta no solo nos ha ruborizado a nosotros, los currantes, sino a su propio hijo, educado para la continuación de la causa y puesto en el brete de que a su propio padre le lluevan tantas causas.

Ni el país ni el viejo rey parecen haber aprendido nada después de tanto, como si estuviésemos condenados a representar el clásico entremés de Vivan las caenas. Este próximo año celebraremos el segundo centenario del jubiloso grito. Y lo más vergonzoso es que luego –ya mismo- habrá que ir inventando razones de estado para explicar en los libros de Historia las causas reales de qué mérito tuvieron los Borbones para perpetuarse en la institución más privilegiada del país durante más tiempo que todas las anteriores dinastías.