No voy a entrar en detalles, pero lo cierto es que buena parte del feminismo español le ha dado la espalda a la ministra de Igualdad, Irene Montero. Parecía imposible que alguien lograse semejante reto cuando el movimiento feminista español está en plena expansión y se va asentando con solvencia; parecía imposible que la representante de una formación política que ha llevado, desde su creación, la bandera del feminismo por delante hiciera un destrozo como el que ha conseguido Irene Montero.
En términos coloquiales, se podría decir que a Irene Montero se le ha ido la pinza con este asunto y ha radicalizado su postura de forma grotesca hasta conseguir que el bloque principal del feminismo español se oponga a sus políticas.
Hay que comprender que renunciar a un cargo político de esta envergadura y al sueldo que representa (más los complementos y esas gaitas que los políticos cobran por diversas razones) debe ser un movimiento poco atractivo. Es mejor hacer el Tancredo y esperar a que escampe. Y si tienes a miles de mujeres protestando por lo que haces en las calles de España, ni miras. En esta vida, todo termina pasando.
Por otra parte y para terminar de romperlo todo, el amigo Pablo Echenique se ha descolgado con un tuit sobre el asunto muy curioso. Dice lo siguiente: «Hoy el telediario de TVE1 ha disfrazado de “manifestación feminista” una pequeña concentración contra los derechos humanos de las personas trans y el presentador se ha encargado de decir que pedían la dimisión de la Ministra de Igualdad. Tuve que parar de comer por las náuseas».
El tuit es curioso porque el que escribe estaba allí y pudo comprobar que era una manifestación importante y se pedía la dimisión de la ministra Irene Montero, claro que se pedía. Que nadie crea que fue una invención del presentador del informativo de TVE1. Este Echenique es capaz de mentir, de señalar o de cualquier otra cosa para defender a los suyos aunque eso sea un disparate. Ah, y es un poco delicado este chico ¿no? ¿Náuseas por estas cosas?
Desde luego, todos estos que venían a acabar con la casta, todos estos que decían defender las libertades esenciales, se están luciendo.