¡Qué ilusión: el rey emérito regala millones!

Leo que el rey Juan Carlos I pidió a Arturo Fasana (persona que gestionó su fortuna en Suiza) que transfiriera un milloncito de euros a Marta Gayá, porque era su amiga y quería que la mujer tuviera «un nivel de vida decente».

Todos criticando al rey emérito y ahora resulta que es el Robin Hood español. Se lo quita a sí mismo para dárselo a los que son menos ricos que él. Bueno, no es exactamente como Mr. Hood, pero ustedes me van a permitir la licencia.

Juan Carlos I es el rey campechano, el rey manirroto, el rey que mejores regalos recibe de sus amigos y el rey que mejores regalos hace a sus amigas. No se conoce un caso parecido en la historia de España.

Creo yo que lo que hay que proponer al rey emérito, porque es muy campechano y eso, es que haga un sorteo y regale a 65 españoles que viven de pena un milloncito para que tengan un nivel de vida decente. Y así se acaba el problema de la millonada que le regalaron a él y que él regalo a Corinna. Pasaría de ser el posible comisionista, tramposo o algo así, a ser Juan Carlos I ‘el generoso’.

Parece ser que el rey emérito pidió a Arturo Fasana que fuera especialmente discreto con este asunto. Qué cosas tiene el rey emérito. Hace el bien, una y otra vez, y no lo quiere contar por pudor seguramente, para que nadie crea que lo hace buscando un aplauso fácil. Qué hombre tan majo.

En fin, este episodio comienza a ser insoportable y un insulto a la inteligencia de cualquier ciudadano español.

El panorama es desolador y la Corona está siendo vapuleada como nunca antes había sucedido; por alguien que ha creído estar por encima del bien y del mal, por encima de lo que representó en su momento, por encima de una institución que siempre queda aunque las personas dejen de existir. El prestigio de la monarquía española está bajo mínimos y esta vez el único culpable es el rey emérito. Ya veremos cómo solucionan este desastre.