Los medios y los días

¿Selectividad o coladero?

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08 jul 2020 / 04:35 h - Actualizado: 07 jul 2020 / 11:36 h.
"Los medios y los días"
  • ¿Selectividad o coladero?

Se están desarrollando los exámenes universitarios de selectividad. Este año, con eso de la pandemia, los alumnos tienen que estar más separados físicamente y por tanto se necesitan más aulas y más profesores. Hasta hace poco aún recibí un correo electrónico para que me apuntara a tales menesteres si era mi deseo. No está mal, vigilancia de pruebas, correcciones y un dinerito adicional a la paga extra de verano que no viene nunca mal. Pero yo prefiero tener tiempo para mí que eso es también dinero. Además, no me gusta esta selectividad, nunca me ha gustado.

Cuando todo acabe, más del 90 por ciento de los alumnos habrán superado las pruebas, haya o no haya pandemia. Y, con todos mis respetos, eso no es normal. En lo que a futuros alumnos de Periodismo se refiere, invito a hacerles una prueba de cultura general antes de entrar en la facultad y otra de actualidad informativa, de lo que pasa en el mundo. Habría que echar para atrás a muchos más de los que la selectividad va a permitir que entren en el primer curso del Grado en Periodismo, eso lo sabemos en la universidad pero la selectividad sigue porque aquí lo que interesa es meter a gente en la universidad pública para con los años ganar votos aunque sea a costa de subir el paro y amargarles la vida a miles de jóvenes que verán cómo el mercado no puede absorber esa cantidad de graduados que egresan de la universidad pública a la que, poco a poco, se va convirtiendo en una universidad de segunda.

La selectividad por tanto no es una prueba ni rigurosa ni académica ni justa, es un coladero de jóvenes que después demostrarán su incompetencia y su falta de interés por los estudios, muchos profesores se desesperarán y hasta estarán deseando jubilarse, los empresarios dirán que los preparamos mal para ejercer, pero, eso sí, los padres y familiares -que son los que votan- estarán contentos porque gozan de hijos universitarios, algunos de los cuales recibirán becas que tampoco merecen.

Y la farsa sigue y a los que defendemos la universidad pública diciendo estas obviedades encima tratarán de crucificarnos. Me entero de que un grupo de colegas impulsan un escrito en el que pretenden mejorar la docencia y en general la Universidad de Sevilla; no lo he firmado, pero debo mirarlo con todo interés porque en lo que a mi Facultad de Comunicación respecta le puede venir muy bien un buen repaso.

Señoras y señores, llevo casi treinta años dando clases en la US, en Periodismo. Y soy consciente de que mis clases son sólo para una minoría de los alumnos que se sientan ante mí en el último curso de la carrera, lo digo aquí y se lo digo a los propios alumnos. Amo mi profesión y sólo por esos pocos alumnos competentes vale la pena ir a seguir disfrutando con lo que hago. El resto no comprendo cómo pudo superar la selectividad, aunque esto sea una forma de hablar porque lo comprendo muy bien y es penoso.