El Pedroso muestra su malestar por el traslado de la oficina de Caja Rural

Desde este próximo viernes la oficina se traslada a Castilblanco de los Arroyos, a 34 kilómetros. Los clientes están siendo avisados por carta con solo una semana de antelación

El Pedroso muestra su malestar por el traslado de la oficina de Caja Rural

El Pedroso muestra su malestar por el traslado de la oficina de Caja Rural / José Ángel Fontecha

José Ángel Fontecha

La despoblación es un mal inmisericorde que ataca muy especialmente a la Sierra Morena de Sevilla en nuestra provincia. La sangría poblacional es un hecho contrastado año tras año y las causas suelen hallarse en la migración hacia grandes urbes en detrimento de los pueblos. Detrás de este fenómeno que amenaza las zonas rurales suele estar la disminución de los servicios. Y este es un pez que lleva años mordiéndose la cola, ya que administraciones y empresas se escudan en la disminución de población para la retirada de servicios, y la población se basa en la reducción de servicios para la huida a la ciudad.

En los últimos años las zonas vaciadas del país están viendo como cada vez son más los servicios que se están volatilizando. Y en este apartado tiene especial relevancia el sector bancario. A la cada vez más notoria presencia de gestiones informatizadas, se une el cierre y/o traslado de oficinas. Ahora la Sierra Morena de Sevilla sufre una de esas reducciones en El Pedroso, con el traslado de la oficina de la Caja Rural.

“Nueva realidad del mercado”

Los pedroseños y pedroseñas están siendo testigos en estos días de un hecho, para ellos, inaudito. Los clientes de esta entidad están recibiendo cartas informándoles que han adecuado su presencial territorial “a la nueva realidad del mercado”. Tal adecuación tiene una consecuencia inmediata, y es que desde este próximo viernes 28 de octubre la oficina 0610, sita en calle San Isidro Labrador 1 de El Pedroso se trasladará a Castilblanco de los Arroyos, pasando a gestionar sus cuentas la oficina 0711. En la misiva, además, se detalla que en esta nueva ubicación el cliente encontrará la misma atención personalizada que ha recibido hasta ahora, con un equipo humano reforzado y especializado cuyo objetivo es “incrementar, en lo posible, la calidad de servicio que se ha venido ofreciendo”. Eso sí, treinta y cuatro kilómetros más lejos.

Malestar vecinal

La situación ha provocado el lógico malestar de los vecinos y vecinas de la localidad que no entienden el porqué de esta decisión, en una caja que, según cuentan, siempre ha funcionado muy bien en la localidad.

El Alcalde de El Pedroso, Juan Manuel Alejo, a tenor del malestar vecinal ha querido conocer de primera mano la problemática de esta decisión y ha pedido una reunión con los responsables de la entidad, aunque de momento no ha obtenido respuesta. A su parecer, la decisión puede ser muy perjudicial para el pueblo y especialmente para la gente mayor que no está adecuada a los nuevos medios tecnológicos y precisan de hacer gestiones de manera presencial en la oficina.

Acción consistorial

De la misma manera, el primer edil pedroseño ha reconocido no entender por qué se llevan el grueso de las cuentas a Castilblanco de los Arroyos cuando la oficina de Cazalla de la Sierra está más cerca. También se ha remitido al compromiso de la FAMP en relación con la cobertura de las oficinas bancarias, un compromiso que obliga a que en cada localidad haya una oficina. De producirse el traslado de esta oficina a El Pedroso tan solo le quedaría la que ostenta actualmente La Caixa.

Ante esta situación, el descontento de la población se puede traducir por el traslado de sus cuentas desde la Caja Rural a La Caixa para poder operar de manera presencial en su propio pueblo, o también en el traslado de cuentas dentro de la propia Caja Rural para que sus oficinas de referencia sean las de Cazalla o Constantina.

Desde el Ayuntamiento de El Pedroso aseguran que no se van a quedar de brazos cruzados y que van a poner todo de su parte para que esta situación sea lo menos perjudicial posible para sus vecinos. Así, van a insistir en reunirse con los responsables de Caja Rural del Sur y acompañarán a las personas mayores con todos los medios a su alcance para mitigar la situación que desde el consistorio califican como falta de ética. Junto a ello, también se ha puesto en contacto con FACUA, con la OCU, con la Oficina contra la Despoblación, con Consumo de la Junta de Andalucía en incluso con el Banco de España. Todo por y para que la situación sea lo menos perjudicial para sus vecinos y dar solución a este importante problema. Asimismo, han remitido comunicación al Defensor del Pueblo Andaluz, a fin de poner luz en este asunto que amenaza con oscurecer el devenir tranquilo de este pueblo serrano.