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Vista aérea de las obras del tranvía de Alcalá de Guadaíra, que están casi concluidas. / El Correo
La obra civil del tercer y último tramo de la ampliación de la línea 1 del Metro de Sevilla hasta Alcalá de Guadaíra «está prácticamente culminado, con un nivel de ejecución del 99,79 por ciento de la inversión prevista en la conexión entre la estación Pablo de Olavide y el Parque Tecnológico de esta prolongación tranviaria, de manera que solo resta por ejecutar un 0,21 por ciento de la inversión prevista», según informó este miércoles el consejero de Fomento, Felipe López, quien no despejó la duda de cuándo podrá entrar en servicio.
En una pregunta formulada por el PP en comisión, el consejero explicó que en paralelo a la culminación de la obra civil de este tercer y último tramo del tranvía de Alcalá de Guadaíra, la Consejería de Fomento y Vivienda trabaja en la licitación de los sistemas de señalización, comunicaciones, electrificación y energía, de acuerdo al modelo de operación previsto. López apuntó que se mantiene la fecha de que el horizonte de explotación esté «no más allá de 2019».
«Estamos intensamente trabajando para restituir la velocidad de ejecución de la obra, que resultó afectada por los efectos de la actividad económica», indicó López, quien invitó al PP a que «diga una comunidad española que esté haciendo un esfuerzo sostenido de 2.600 millones como hace Andalucía». «Estamos ocupados trabajando, intentando cumplir los plazos en el menor tiempo posible, y estamos resolviendo los contratiempos que hemos tenido», dijo.
Esta ampliación de la línea 1 del Metro de Sevilla hasta Alcalá de Guadaíra, que discurre entre la estación Pablo de Olavide del suburbano y la parada término de Montecarmelo, consta de un trazado de 12,6 kilómetros y 11 paradas previstas, y su obra civil, es decir, la ejecución de infraestructura, vía y urbanización, se dividió en tres tramos para su construcción, concluyéndose los dos primeros en 2012.
En este sentido, el consejero indicó que la reactivación del tercer y último tramo, que «prácticamente está concluido», fue una de las obras que se reanudó en mayo de 2015, tras la fase de reprogramaciones de infraestructuras que originó el ciclo más agudo de la crisis económica. «En este periodo de tiempo hemos restituido la velocidad en la ejecución del proyecto, dentro de una apuesta inversora sostenida por parte del Gobierno andaluz de más de 2.600 millones de euros en los diferentes ferrocarriles metropolitanos de la comunidad, que no tiene precedentes en otras administraciones autonómicas», destacó.
La Junta precisó que la construcción de este tercer y último tramo de esta conexión con Alcalá de Guadaíra ha supuesto una inversión de 27,7 millones de euros, importe que sumado a los otros dos tramos ya ejecutados, equivale a una inversión total ya efectuada de 97,62 millones de euros.
Por suparte, el diputado del PP Juan Bueno criticó que la Junta haya dado «demasiados días para inaugurar la obra» y recordó que «un documento del Ayuntamiento de Alcalá decía que el tranvía estaría a disposición de todos los alcalareños en 2012». Bueno censuró que se hayan «cumplido las fechas», apuntó que «hay demasiados interrogantes para caer en el pesimismo, pues no ha sido 2017, no va a ser 2018 y nos tememos que tampoco sea en 2019».
El diputado popular añadió que «hay fases sin terminar, y la electrificación, señalización y la seguridad ni siquiera se han empezado a gestionar para acometer esas obras» y recordó que «se registraron actos vandálicos y se robó material de las vías, que sigue sin reponerse».