La Cooperativa San Sebastián de Guadalcanal inaugura su nueva bodega

Entrado el otoño Guadalcanal ya huele a aceituna. Sin embargo, durante todo el año, en el paladar queda ese regusto agradable del aceite de oliva. Y no un aceite cualquiera, uno único que tan solo puede ofrecer esta localidad. Fuente de vida de muchas familias en el pueblo, no es de extrañar que la producción del oro líquido guadalcanalense avance hacia la prosperidad a pasos agigantados, y una muestra de ello es la construcción de la nueva bodega de la Cooperativa Olivarera San Sebastián.

Dicha bodega se inauguraba en la mañana de hoy jueves, contando con la presencia de socios de dicha cooperativa, su junta rectora, representantes municipales y de otras instituciones comarcales como el GDR Sierra Morena de Sevilla. Fuera, la bendita lluvia daba ese aliento necesario al campo, donde comienza el verdadero proceso del aceite de oliva. Dentro, en las instalaciones de la cooperativa se daba la bienvenida a una mejora necesaria.

Aumento considerable de la capacidad

Pasadas las doce de la mañana y tras la recepción oportuna en las propias oficinas de las instalaciones, la propia bodega de reciente estreno acogió el acto de bienvenida a esta inauguración. Tomó la palabra la Presidenta de la Cooperativa San Sebastián, Manuela Roque, quien señaló la importancia de este día para todos. Aludió al sueño de aquellos diecisiete hombres que idearon esta cooperativa en el año 1967, que con el paso de los años “ha ido creciendo en instalaciones y calidad”. Habló del producto final y su éxito como una apuesta por la calidad y la singularidad, esta última trabajada gracias a una variedad de aceituna autóctona que da como resultado un aceite único.

Asimismo, Roque dio cuenta de las cifras que actualmente tiene la cooperativa en cuanto al almacenaje. En total puede albergar casi un millón y medio de kilos de aceituna, gracias a esta nueva bodega que tiene capacidad para quinientos noventa y dos mil kilos, repartidos en nueve depósitos de cincuenta y cuatro toneladas, tres de veinte y uno de seis.

Antes de cerrar su intervención, la Presidenta refrendó el orgullo que supone para todo vecino y vecina de Guadalcanal que al nombrar a su pueblo hagan referencia a su aceite, siendo esto la recompensa al trabajo llevado a cabo durante muchos años.

Apuesta por mejorar

Tras Manuela Roque tomó la palabra uno de los grandes artífices de esta nueva bodega, Juan de Dios Sánchez, el ingeniero que ha llevado a buen puerto estos trabajos. En su discurso hizo referencia al proyecto de fusión que en su día se trató con otras cooperativas, pero que finalmente no llegó a realizarse, y a partir de ahí, ensalzó la voluntad de la Cooperativa San Sebastián para seguir apostando por mejorar sus instalaciones y, por ende, la calidad de su aceite.

De la obra en sí, Juan de Dios Sánchez destacó la dificultad que se encontró por la misma delimitación de la parcela. Un hecho que hizo que tuvieran que adaptarse a ese espacio, aunque el resultado final compensa toda dificultad. Volviendo a hacer referencia al buen hacer de la junta de la Cooperativa, relató el mal estado en el que se encontraban las instalaciones hace nueve años, y también en la concienciación y la apuesta decidida por llevar a cabo todas las mejoras posibles en estas instalaciones y en su producto final.

Una invitada de excepción

Tras la intervención del ingeniero responsable de los trabajos de la bodega se situó tras el atril la Delegada Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, María Isabel Solís Benjumea, quien señaló, en primer lugar, el mal endémico de la zona, que no es otro que el de la despoblación. Un mal que se combate, entre otras cosas, con progreso y acciones como la llevada a cabo, en este caso, por la cooperativa guadalcanalense. La forma asociativa de este ente fue otro de los puntos que Solís Benjumea destacó en su discurso, pues reconoció que las cooperativas juegan un papel clave, llegando a ser empresas sociales con objetivos importantes.

Haciendo alusión al aceite de Guadalcanal, y concretamente al producido por la Cooperativa San Sebastián, la Delegada hizo alusión a los muchos reconocimientos que tiene este producto, algo que lo convierten “no solo en uno de los mejores aceites de la provincia, sino también de toda Andalucía”.

Pasión y esfuerzo

También estuvo presente en el acto la Alcaldesa de Guadalcanal, Regina Rivero, quien cerró la ronda de intervenciones felicitando tanto a la junta gestora de la Cooperativa como a los socios, de los que destacó su pasión y esfuerzo. Unas cualidades que se ven reflejadas ahora en estas nuevas instalaciones. De ellas señaló que son más que un edificio, “son la determinación para impulsar el progreso en la industria del aceite de oliva”, y concluyó afirmando que el éxito se mide en la “pasión y esfuerzo de todos los que formáis parte de esta cooperativa”.

El patrón de Guadalcanal

Para proceder a la inauguración de esta nueva bodega se contó con la presencia del Párroco de Santa María de la Asunción, D. Aniceto Vadillo, que fue el encargado de bendecir estas nuevas instalaciones. Antes de proceder a dicha bendición quiso acordarse de la patrona y el patrón de Guadalcanal, Ntra. Sra. de Guaditoca y San Sebastián, de quien toma el nombre esta cooperativa y a la cual anunció que regalarían un cuadro de dicho patrón, provocando uno de los momentos más simpáticos de la jornada.

Un aceite muy reconocido

Tras los actos protocolarios de la inauguración se procedió a visitar la cooperativa, mostrando además de la otra parte de la bodega, las salas de envasado y las cintas por donde pasa la aceituna antes de molturarla. Es en estas instalaciones donde nace un producto muy reconocido y premiado no solo a nivel provincial o nacional, sino también internacional, con premios y distinciones en Tokyo o Nueva York, entre otros importantes lugares.

Actualmente la cooperativa tiene en el mercado cuatro variedades de aceite, el AOVE Sierra del Guadalcanal, el Premium, el Ecológico, y el producto estrella, el Guadalimón.