Un peligro menos en la carretera

La Policía Local de Castilleja de la Cuesta detecta a un conductor que dio positivo en dos drogas distintas, y recuerda la importancia de retirar a estos peligros con ruedas de la vía pública

13 nov 2022 / 13:56 h - Actualizado: 13 nov 2022 / 14:07 h.
"Policía Local","Carreteras","Cocaína"
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¿Es normal conducir un vehículo después de haber consumido drogas? A la vista de algunas actuaciones recientes de la Policía Local de Castilleja de la Cuesta parece que sí, aunque, afortunadamente no es la tónica habitual.

A través de sus redes sociales oficiales, este cuerpo policial ha difundido el test de drogas que fue realizado esta semana a un conductor, que dio positivo en dos en concreto. Había cogido el coche después de haber consumido cocaína y opiáceos. Como dice la Policía muy gráficamente, es un peligro al volante que, con su multa correspondiente, ha sido retirado de la carretera.

“Aunque algunos no lo entiendan (porque no les ha tocado vivir una desgracia) nosotros vamos a seguir trabajando para que nuestros vecinos circulen tranquilos y seguros por nuestras carreteras, apartando de la circulación a peligros como este”, dice el mensaje que han difundido, haciendo público además la imagen del test de drogas correspondiente.

Un positivo sin porcentajes

Los positivos en drogas, a diferencia de los de alcoholemia, no se miden en porcentaje de droga consumida y detectada por el test. Es decir: si se da positivo, ya cae la multa, da igual que sea por un porro o por cinco gramos de cocaína.

La multa no es nada despreciable, ya que asciende a 1.000 euros y, además también conlleva la retirada de seis puntos del carnet de conducir.

A diferencia de la alcoholemia, además, se sanciona en función del consumo, porque si no se presentan efectos visibles de haberla consumido, da igual. La multa cae aunque el conductor manifieste que está capacitado para conducir e incluso el agente constante que es así.

La Ley establece que no se requiere que se muestren síntomas de estar afectado, y da igual el nivel de droga en sangre. No obstante, se podría aplicar también una sanción penal, con lo que el asunto no es, ni mucho menos, una broma.

Pero cuidado, además, si los agentes detectan síntomas que hagan evidente que no se está en las condiciones idóneas para la conducción, porque ahí entra la sanción penal.

Si el agente pide al conductor, por ejemplo, que se baje del vehículo y no es capaz de mantenerse en equilibrio o está excesivamente nervioso, llega la vía penal.

La prisión no es descartable

El tema penal en estos casos es para tenerlo en cuenta, aparte eso sí del problema para todos que supone que haya un conductor drogado en una carretera conduciendo como si tal cosa.

El sancionado se puede enfrentar a la retirada total del carnet de conducir, y puede llegar a tener que pagar una multa adicional, realizar trabajos para el beneficio de la comunidad o incluso ingresar en prisión.

Eso sí, las sanciones no son acumulativas, de modo que o se le sanciona por la vía penal o por la administrativa, nunca las dos juntas.