UNIÓN EUROPEA

El aeropuerto de Sevilla y Santa Justa tendrán que estar conectados por tren, según la nueva normativa de Europa

El nuevo reglamento europeo otorga por derecho comunitario, y desde este mismo mes, un enlace "obligatorio" de transporte sostenible a la terminal

La nueva normativa obliga a aquellos aeropuertos que reciban al año entre cuatro y doce millones de pasajeros

Estación de Santa Justa.

Estación de Santa Justa. / Samuel Aranda

El aeropuerto de Sevilla y la estación de Santa Justa deberán estar conectadas por tren o metro. Ya no se trata de una recomendación sino de una obligación, en base al nuevo reglamento de la Unión Europea, que entra en vigor este mismo jueves. La norma otorga, por derecho comunitario, una conexión de transporte sostenible a la terminal ubicada en los terrenos de San Pablo.

En concreto, se trata del reglamento 2024/1679 relativo a las orientaciones de la Unión para el desarrollo de la red transeuropea de transporte. La entidad ciudadana Sevilla Quiere Metro ha valorado este "espaldarazo" de Europa a la conexión ferroviaria entre Santa Justa y el aeropuerto. La nueva normativa aplica a todos los aeródromos que reciban entre cuatro y doce millones de pasajeros al año, como es el caso del aeropuerto de San Pablo.

Limitar las emisiones

El nuevo texto pone el foco en la sostenibilidad, la integración multimodal, la innovación y la resiliencia. "Para nuestra área metropolitana esto representa el impulso decisivo para conectar el aeropuerto de Sevilla mediante transporte ferroviario, consolidando su papel como un nodo fundamental en la red básica TEN-T", indican desde la citada entidad a Europa Press.

Sevilla tiene que reducir su emisiones al menos un 55% para 2030

El artículo 58 del reglamento establece que "en el caso de los aeropuertos con un volumen total anual de tráfico de más de cuatro millones y menos de doce millones de pasajeros situados en un nodo urbano de la red ferroviaria transeuropea o en sus proximidades, la conexión del aeropuerto al nodo en cuestión por ferrocarril, metro, tranvía ligero, teleférico o, excepcionalmente, otras soluciones de transporte público de cero emisiones".

El límite para alcanzar el objetivo de la conexión ferroviaria entre San Pablo y Santa Justa es el año 2050

En el caso de los  aeropuertos de menos de cuatro millones de pasajeros, la norma recoge la "recomendación" de la conexión ferroviaria. Sin embargo, en los aeródromos de más de doce millones de usuarios, el texto habla de "obligatoriedad de la conexión ferroviaria de alta velocidad".

En este sentido, teniendo en cuenta los estudios informativos licitados por la Junta de Andalucía, la opción más factible, en opinión de Sevilla Quiere Metro, sería implementar un sistema ferroviario de Cercanías que proporcione una conexión "directa y rápida" entre el aeropuerto y Santa Justa.

No sólo San Pablo

Además, para facilitar la cohesión social y garantizar una demanda que permita "una rentabilidad no sólo económica, sino también social", se considera necesario que la alternativa de trazado del Cercanías conecte también con varios puntos clave cercanos, como Sevilla Este, Fibes y Parque Alcosa. Al respecto, el estudio encargado por la Junta concluyó que ésta es la mejor alternativa de trazado, que coincide con la planteada previamente por la asociación Sevilla Quiere Metro.

Paralelamente al estudio de la Junta, en marzo de 2023 el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible formalizó el contrato para realizar el Estudio Informativo de la conexión ferroviaria entre la estación de Santa Justa y el aeropuerto de Sevilla. Con un plazo de ejecución de 24 meses, se espera que esté finalizado en marzo de 2025.

Desde Sevilla Quiere Metro esperan que la solución adoptada cumpla con los requisitos establecidos por la Unión Europea: reforzar la cohesión económica, social y territorial, "contribuyendo así a la prevención y mitigación de la pobreza de transporte que sufre de forma crónica el área metropolitana de Sevilla".

Objetivo: la neutralidad climática

Sevilla forma parte de la Misión de las 100 ciudades inteligentes y climáticamente neutras para 2030, lo que implica que Sevilla tiene que reducir sus emisiones al menos un 55% para 2030. Esta misión se desarrolla en otras 100 ciudades de la Unión Europea, que actuarán como centros de experimentación e innovación para que otras puedan seguir su camino de aquí a 2050.

Para conseguir la neutralidad climática a través del transporte, la Unión Europea establece varios hitos en su sistema de transporte: aumento de la cuota de mercado del tráfico ferroviario de mercancías en un 50% para 2030 y duplicarla para 2050; aumento de la cuota de mercado del transporte por vías navegables interiores y marítimo de corta distancia en un 25% para 2030 y en un 50% para 2050; duplicar el tráfico en ferrocarril de alta velocidad para 2030 y triplicarlo para 2050, así como lograr al menos 30 millones de automóviles sin emisiones y 80.000 camiones sin emisiones en circulación en las carreteras de la Unión para 2030.