El resurgir de la calle San Eloy: de encabezar los cierres en pandemia a colarse en la milla de oro

La calle San Eloy ha vivido un antes y un después este último año. Se ha convertido en una de las calles del eje comercial del casco antiguo de Sevilla que más ha crecido en lo que llevamos de año, después de ser la vía peatonal que más sufrió durante la pandemia.

Ubicada entre La Campana y el Hotel Colón, justo detrás de la Plaza de la Magdalena, es parte del recorrido para los transeúntes que aterrizan en la estación de autobuses de Plaza de Armas y quieren llegar hasta el centro histórico. Esta calle ha sido siempre muy de paso, referente del comercio local de la ciudad y calle paralela a exponentes del comercio como Tetuán y O'Donell.

La secretaria general de Alcentro, la Federación de Comercio y Servicios del Centro de Sevilla, María Pérez, asegura en una conversación a este medio que San Eloy fue la calle comercial del casco antiguo de Sevilla, junto con la calle Cuna, que más negocios cerró durante los meses de confinamiento y restricciones.

En total, cerraron las persianas "hasta el 70% de los negocios" que habitaban en dicha calle. Un bache del que le costó "más de dos años" remontar, pero del que hoy, cuatro años después, ni se acuerda.

Durante la pandemia cerraron hasta el 70% de los negocios de la calle

María Pérez

— Secretaria general de Alcentro, la Federación de Comercio y Servicios del Centro de Sevilla

A día de hoy nadie diría que la misma calle que en 2020 "solo tenía abiertas algunas cafeterías, la administración de lotería y una tienda" ahora está repleta de transeúntes a todas horas, alberga tiendas como Zara, Springfield o Silbon y faltan paredes para abrir más locales. Una fuente de consumo.

El auge de una calle 'secundaria'

Pérez lo resume de esta forma: "San Eloy ha esprintado". ¿El motivo? Según la secretaria general de Alcentro, el causante de este crecimiento es principalmente el turismo. "Hace dos años estaba lleno de carteles de Se Vende, Se Alquila o Se Traspasa", argumenta la portavoz del gremio de comerciantes, a lo que añade que "ahora solo quedan dos locales vacíos en la calle, casi pleno".

Otro de los principales motivos que se ve reflejado en el informe anual de la asesora inmobiliaria Inerzia es que desde el año pasado apenas quedan locales disponibles en el Centro.

San Eloy, que está muy cerca del eje Tetuán/Velázquez/O'Donnell, bautizado como la milla de oro, ha sido la solución para pequeños, medianos y grandes comerciantes que no han encontrado un local en el eje comercial, o que no han podido asumir el alto precio de los locales en dicha zona.

El estudio revela un incremento generalizado en el precio medio de alquiler de locales en la ciudad, especialmente en el Centro. Las calles Tetuán y Velázquez, el eje donde se registra el precio medio más alto de alquiler, tiene un precio medio por metro cuadrado de 142,5€, lo que significa que han experimentado un incremento del 5,6% en su precio respecto a 2022 y ahora mismo la tasa de disponibilidad de locales es nula.

Por su parte, la calle O'Donnell, paralela a San Eloy, tiene un precio medio por metro cuadrado de 24,6€, ha aumentado hasta un 2,5% en su precio desde 2022 y tiene una tasa de disponibilidad del 10,8% siendo la calle con más locales vacíos en el centro.

Según un informe, la milla de oro es la zona con el metro cuadrado más caro del Centro de Sevilla

En términos generales, el Centro de Sevilla sigue siendo la zona más cara de la ciudad, según datos de Inerzia, al concentrar 10 de las 13 calles más caras de la capital andaluza.

En menos de un año han abierto negocios como: Zara, Springfield, Silbon, Esenzia, Ratatouille Cheesecake, Tu Tortilla, Amaawa y Vestopazzo, entre otros. Pero de los locales que conforman la calle, la gran mayoría, según Pérez, tienen como máximo dos años y medio de antigüedad.

Sobre el crecimiento del turismo, el gerente de Grupo San Eloy, Felipe Leal, coincide con la portavoz de Alcentro, quien en una conversación con este medio insiste en que "el turismo ha hecho que San Eloy resurja".

Leal cuenta que el Grupo San Eloy, que tiene seis comercios de hostelería en la calle además de 10 locales y varios bloques de apartamentos turísticos, padeció las consecuencias de la pandemia, perdiendo hasta el 70% de la facturación. Los propietarios de este negocio son los más veteranos de la calle, donde fundaron el primer colmado hace más de 70 años.

Asimismo, la portavoz de Alcentro habla de esta "calle secundaria" como una de las mejor situadas. "Desde que peatonalizaran la Plaza de la Magdalena, la zona tiene mucha más vida". También hace alusión al precio de los alquileres de esta vía peatonal, más asequibles que los de sus calles vecinas, Tetuán y O'Donell, aunque tras la llegada de Zara, "seguro que han aumentado".

Del comercio local a los souvenirs

No es difícil percatarse de que el casco antiguo de Sevilla está cada vez más enfocado al turismo, con locales pensados única y exclusivamente para los visitantes. Especialmente aquellos que venden souvenirs, bocadillos de jamón ibérico, porciones de pizza o bisutería a un precio muy reducido.

Esta es una situación que afronta ahora mismo la calle San Eloy porque su crecimiento la convierte en un enclave idóneo para los grandes inversores.

Por el momento mantiene un curioso equilibrio entre grandes marcas como Zara o Silbon, comercios virales en las redes como Ratatouille Cheesecake o Esenzia, que generan largas colas en la calle, y negocios locales y artesanales como Portugal.Home o Amaawa, la única tienda de Sevilla que además de vender complementos de mujer y medallas hechas a mano, alberga una capilla bendecida en uno de sus escaparates.

Tal como apunta Pérez, desde Alcentro describen el comercio tradicional y/o local como "el lince ibérico" del casco antiguo, una especie que hasta hace poco estaba en peligro de extinción.

La irrupción de Zara revoluciona la calle

En noviembre del año pasado el gigante de Zara llegó a dicha calle, a un local de 6.000 metros cuadrados, para abrir una de sus primeras flagship stores en Europa donde convive la tecnología con la asistencia personalizada. Su aterrizaje en San Eloy a clientes y marcas que han sabido "aprovecharse" del éxito garantizado de esta apertura.

Casos como Silbon, que estaba en la calle Muñoz Olivé, donde está Rocío Peralta o la joyería Vidal, ha cambiado su sede de Sevilla para llegar a San Eloy, al igual que Springfield.

"El local donde ahora está Silbon ha estado cerrado durante cinco años", subraya la secretaria general de Alcentro.

Por su parte, el gerente del grupo San Eloy explica que la llegada de la multinacional española a esta calle fue "una gran noticia". Como consecuencia, Leal afirma que los negocios del grupo que están en la calle han aumentado un 10% su facturación.

Los vecinos nos decían que hacía años que no veían la calle con tanto movimiento

Alessandro Ridolfi

— Cofundador de Esenzia

Un argumento similar comparte Alessandro Ridolfi, uno de los fundadores de Esenzia, la marca de ropa juvenil sevillana que triunfa en redes sociales. "Desde que llegamos a la calle San Eloy nuestra facturación ha crecido muchísimo", reconoce el joven empresario a este periódico.

Esenzia, durante la campaña de Navidad provocó largas colas en la calle, y Ridolfi recuerda que los vecinos de la calle le aseguraban que "hacía años que no veían la calle con tanto movimiento".

El fundador de Esenzia confiesa que "muchas marcas que venden online quieren venir a esta calle", por lo que habrá que esperar unos meses más para analizar el desarrollo de esta calle, consagrada indiscutiblemente como una de las más comerciales del Centro de Sevilla.