El hotel rural de Sevilla sacado de cuento del siglo XVII con un pasado bandolero

En la provincia de Sevilla hay haciendas y grandes casas rurales para disfrutar de la naturaleza, la tranquilidad, encontrarse con uno mismo o pasar con la familia unas jornadas de relajación lejos de la rutina diaria. Es la opción que traemos hoy, se trata de una conocida hacienda y a la vez gran casa rural de Sevilla, concretamente en el municipio de Utrera.

Lo primero que puede pensar cualquier lector es que la Hacienda de Orán en Utrera en un lugar prefecto para las celebraciones de todo tipo, pero pocos saben que es un alojamiento rural de primer orden, habitaciones confortables con todas las comodidades, buena comida, piscina en verano y experiencias relacionadas con el vino, el aceite y la cocina.

Hay relatos variopintos sobre el origen y la historia de esta finca olivarera del siglo XVII: desde un lugar para el rezo, de ahí vendría el nombre de Orán; o la otra hipótesis es la relativa a su orientación, mirando a la ciudad argelina de Orán y evocando al rezo islámico mirando a la Meca. Cabe destacar en la historia de la finca una leyenda sobre el bandolero Diego Corrientes y su "anécdota" sangrienta. Al parecer un falso Diego Corrientes disfrazado de fraile asaltó a un padre y su hija en el siglo XVIII y al enterarse el verdadero bandolero, fue a buscarle enfurecido, encontrándolo escondido en la Hacienda de Orán. Ahí hizo algo drástico, le cortó la cabeza.

Un alojamiento confortable sacado de cuento

La hacienda cuenta con La Casa del Señorío, la antigua vivienda principal que se ha convertido con el tiempo en parte de este hotel rural de 19 habitaciones totalmente diferentes entre sí con todo tipo de comodidades y decoración única. Son 13 habitaciones dobles, suites junior y suites superiores, que hacen que parezcan estancias sacadas de cuento. En el importe de todas las habitaciones entra el desayuno, según informa este establecimiento hotelero. Aunque no tiene un servicio de restauración al uso, tiene un completo servicio de snacks de todo tipo con el que se soluciona el problema de la comida.

Qué hacer en la hacienda: cocinar, yoga, catas de aceite, de vino...

Algo importante en este tipo de establecimientos son las experiencias que se le ofrece al cliente aparte de la tranquilidad de un entorno agradable y cómodo para disfrutar. Así, esta finca ofrece actividades que conviene contratarlas antes de tiempo para tenerlas atadas antes de llegar al hotel, como cursos de cocina, cursos de yoga, catas de aceite, catas de vinos de la región, combates de paintball o recogidas de la aceituna.

Este espacio de la provincia de Sevilla es muy conocido por albergar múltiples eventos de todo tipo: desde bodas, comuniones, cumpleaños o eventos familiares a todo tipo a reuniones de empresa. Además, hacen una planificación al milímetro de cada acto, con diferentes y amplios salones y patios, tanto exteriores como interiores. Con un servicio de catering especial y posibilidad de alojamiento en el hotel.