Jueves Universitario

Alisa Ozhogina: "He sido entrevistada y sé lo que es decir una cosa y que te cambien el titular"

"Cuando entré a la Universidad por fin pude estudiar lo que me gustaba y pude ir a mi ritmo"

Alisa Ozhogina posa con la medalla de bronce conseguida en los Juegos Olímpicos de París 2024 / S.i.L.S Fotografía

Álex Mérida

Gracias a deportistas como Alisa Ozhogina (Moscú, Rusia, 31 de octubre de 2000) la natación artística, antes llamada sincronizada, es ahora una disciplina menos minoritaria y más reconocida. Mientras entrena y gana medallas para España también estudia a distancia comunicación en la Universidad de La Rioja.

Rusa de nacimiento y sevillana de adopción, donde llegó con un año porque su padre tocaba el violín, ahora presume desde este pasado verano de tener dos diplomas olímpicos y una medalla de bronce, la lograda en París.

"Claro que es un deporte lesivo, cuál no lo es. Los hombros los cargamos mucho, las caderas, los aductores, pero no pasa nada. Sigues entrenando y ya está, te recuperas", explica Alisa sobre la sincro, a la que le dedica entre seis y ocho horas, y a veces diez. "Yo ahora mismo estoy entrenando siete horas. Y bueno, con Andrea, nuestra nueva entrenadora, estamos entrenando de siete y media a dos y media. Y las entrenamos seguidas con un pequeño descanso de quince minutos para comer algo".

Criada en el Club Sincro Sevilla

Esa es la verdad y el día a día de una profesión que ve la luz sólo en mundiales y cada cuatro años con la llegada de los Juegos Olímpicos, y que para la moscovita comenzó en el Club Sincro Sevilla: "Significa todo para mí, son mi familia. Pasaba más tiempo con mis entrenadores que con mis padres, que siempre me han apoyado mucho, pero es que mi entrenadora me entiende, sabe lo que es ese mundo. Supe lo que eran el compañerismo y las amistades, que la gente no esté contigo por lo que eres sino por la persona que eres, que es muy importante. Ahora llevo tiempo en Barcelona pero mantengo contacto con todos y cuando vengo a la piscina es como si el tiempo no hubiera pasado. Aprendí disciplina, a aprovechar el tiempo, esfuerzo y trabajo".

"María del Mar siempre nos dice que trabajo e ilusión es igual a éxito. Entonces, tengamos o no tengamos subacuáticos, medios, patrocinadores, dinero, o lo que sea, nosotras seguimos ahí luchando, porque a nosotras esto nos hace felices, porque no perdemos nada y porque nos lo pasamos bien", argumenta Alisa mientras se deshace en elogios hacia el club de su vida.

"Seguimos quedando campeonas de España en todas la categoría, en la pública, en la que yo, por ejemplo, personalmente no quepo porque la piscina mide 1,70 y yo 1,73. Sin subacuáticos, patrocinadores, sin dinero, todo el mundo con otro trabajo, ya que de ahí no cobra nadie y ahí seguimos dando el callo. Así que, no sé, es admiración pura, y para mí es de las mejores cosas que tengo en mi vida, de verdad. De hecho, soy la persona que soy gracias a ellos".

Alisa Ozhogina posa con la medalla de bronce conseguida en los Juegos Olímpicos de París 2024 / S.i.L.S Fotografía

La universidad, clave en la vida de Alisa

"Pasé diferentes épocas pero siempre fui buena en los estudios y mis profesoras me han ayudado mucho. Siempre he sido muy querida en mis clases, he sido de la clase buena, la clase de los empollones, los superdotados, los que sacaban buenas notas. Mantengo relaciones con muchos de mis amigos de clase, pero es que cuando entré a la universidad por fin pude estudiar lo que me gustaba, y por fin pude ir a mi ritmo. Voy muy lenta a dos asignaturas por semestre pero yo no paro, que eso es lo más importante y que también nos han enseñado aquí, que siempre hay que estudiar. Estudia a tu ritmo, pero nunca pares, con buena letra. La verdad que es algo que disfruto, para mí es incluso de vez en cuando una desconexión. Estoy estudiando comunicación, me encanta mi grado, me gusta mucho hablar en público, lo que me enseñan aquí, hay asignaturas de radio, televisión, periodismo, de marketing... Ahora estoy estudiando el consumidor y todo, que la verdad que es superinteresante, lo voy a aplicar también a mi vida personal, a mi vida profesional, todo".

Cómo es la natación artística

"Tienes que tener fuerza, oído musical, coordinación, flexibilidad. También no tener miedo para todo el tema de las acrobacias. Es el mix de un montón de deportes, de danza, acción y acrobacias", reconoce Alisa, que prosigue aclarando que "requiere muchas cosas, de saber del equipo y también tiene un poco de artística, de expresión y de cosas de teatro. Estamos siempre trabajando la expresión muda corporal, todo el tema de sensación. Siempre estamos sonriendo".

Alisa Ozhogina está centrada en conocer a Andrea, su nueva entrenadora, con la temporada ya empezada: "Estoy mejorando, entrenando el nuevo sistema, hablando del nuevo reglamento y decidiendo a qué competiciones vamos a ir y a cuáles no, con el objetivo final del mundial en Singapur".

Alisa, el periodismo y las entrevistas

La natación artística es la vida de Alisa, que encuentra en su grado de comunicación el momento perfecto del día para desconectar y seguir formándose, pero ahora que ha tenido unos meses intensos de reconocimiento en los medios, se anima incluso con ser algún día ella quien lance las preguntas a otros deportistas: "Tampoco he descartado algún día ser también entrevistadora, porque yo he sido entrevistada, sé lo que es que tú digas una cosa y te cambien el titular totalmente, y la verdad que da mucha rabia, frustra mucho y ojalá se cambie algún día. Y yo quiero ser de las personas con las que realmente el mensaje sea el que el deportista o la persona entrevistada quiera mostrar. Es algo que me parece muy importante y que no se hace muy frecuentemente".

Alisa Ozhogina, medalla de bronce en natación artística en los Juegos Olímpicos de París 2024 / S.i.L.S Fotografía

Pulsa para ver más contenido para ti