Liberar la estampa más bella de Sevilla

El Ayuntamiento prueba la peatonalización de Mateos Gago antes de decidir el proyecto final de regulación de tráfico

30 may 2017 / 16:02 h - Actualizado: 30 may 2017 / 17:00 h.
"Movilidad","La Sevilla peatonal"
  • La Giralda y la calle Mateos Gago sin coches que alteren la magnífica vista. / Jesús Barrera
    La Giralda y la calle Mateos Gago sin coches que alteren la magnífica vista. / Jesús Barrera
  • Turistas este martes por la calle Mateos Gago peatonal. / Jesús Barrera
    Turistas este martes por la calle Mateos Gago peatonal. / Jesús Barrera
  • Varios viandantes este martes en Mateos Gago. / Jesús Barrera
    Varios viandantes este martes en Mateos Gago. / Jesús Barrera
  • La calle Mateos Gago este martes. / Jesús Barrera
    La calle Mateos Gago este martes. / Jesús Barrera
  • El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, durante la prueba de peatonalización. / Jesús Barrera
    El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, durante la prueba de peatonalización. / Jesús Barrera

Tranquilidad a los vecinos que no están de acuerdo con la peatonalización... paciencia para los trabajadores, encargados y propietarios de bares, tiendas y hoteles. Lo realizado este martes, día de San Fernando, en la calle Mateos Gago es solo una prueba, un primer paso previo al consenso que pretende alcanzar el Ayuntamiento que preside Juan Espadas antes de diseñar un proyecto final que sí tiene ya un objetivo claro: liberar de coches –especialmente los estacionados– una calle que cuenta con la que puede ser la estampa más bella de Sevilla.

Entre múltiples grupos de turistas en todos los idiomas y carteles impidiendo estacionar en toda la calle de 9.00 a 15.00 horas, Mateos Gago se convirtió, más que nunca, en el punto de atracción de la ciudad. Sin mucha idea del plan municipal, desde los bares y restaurantes de la calle veían positivo que la calle sea peatonal, aunque con muchos interrogantes: «No nos han informado si va a haber parada de taxi, carga y descarga... Ahora lo que tenemos es incertidumbre sobre cómo va a ser el proyecto», explicaba Rocío, del restaurante Gago, 6, quien insistía en que «por lo menos debería haber una parada de taxi» en un entorno donde hay hoteles y vecinos mayores acostumbrados a tener a un paso el transporte público.

Aún más contenta se mostraba por la medida Elena, encargada de La Azotea: «A ver si es verdad, llevan muchos años diciendo que la van a peatonalizar y no lo hacen». Esta italiana que lleva años en la ciudad destaca que «es una calle muy bonita y los días normales es una guerra. No se puede ver ni la Giralda y es la calle más paseada y visual de Sevilla». Lo que sí reconoce es que «a los vecinos les puede costar, pero se debe hallar una solución fácil para poder tener las dos cosas». Por último, en cuanto a los taxis aseguraba que «preferiría que no hubiera parada en la calle o que estuviera en la zona donde no hay bares».

Ciertamente, como apuntaba Elena, la única voz discordante en la calle la puso un vecino de toda la vida, Juan Pedro: «Me parece fatal, ¿qué mejora la calle con esto? El barrio de Santa Cruz incomunicado... No sé quién puede beneficiarse, qué quieren, ¿que pongan más veladores?», señalaba indignado con la posible peatonalización de Mateos Gago.

Y es que, como apuntaba una empleada de la tienda de cerámica situada en la calle, «el problema será para los que viven, para acceder a sus viviendas». Además, señalaba otra de las preocupaciones generalizadas entre los vecinos: que esto vaya a suponer un incremento del número de veladores. «Que no vaya a ocurrir como en San Jacinto y en Asunción. Hasta ahora es todo coches y veladores».

José, que trabaja en el Palacio Arzobispal y compraba en el quiosco de la esquina, frente al colegio, incidía en que «esta calle no se puede soportar cualquier día de la semana entre coches y veladores... Yo solo digo eso», y no hace falta más.

Por consenso

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, junto a varios ediles, entre ellos el responsable de Movilidad, Juan Carlos Cabrera, y el de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz, recorrió a media mañana la vía dando a conocer el proyecto. «Parece evidente que la calle Mateos Gago está bastante mejor así, con las personas ocupando el espacio público», afirmó Espadas, quien destacó que «es la calle que desemboca en el triángulo patrimonio de la humanidad de Sevilla, y a finales de año se sumará el museo Bellver».

Espadas señaló que el objetivo es la «progresiva ordenación del espacio que pasa por que los propios ciudadanos lo conquisten, pero no por imposición. No queremos generar conflicto».

Así, afirmó que «las aceras son imposibles de transitar», debido a los veladores, especialmente para sillitas o personas con movilidad reducida, pero para cambiar esta situación «lo primero es liberar de vehículos la calle. Sobran vehículos estacionados». El alcalde apuntó que ya hay obras presupuestadas que no se llevarán a cabo hasta que no se diseñe el proyecto final, en cuanto a carga y descarga o vehículos para personas con discapacidad. «Hay que regular el horario de carga. No es razonable que en esta calle a la una aún estén trabajando... y que desaparezca de la primera zona de la calle», la más próxima a la plaza Virgen de los Reyes. También señaló que deben «desaparecer los estacionamientos fijos de hoteles para huéspedes, que también tienen que tener un tiempo de carga limitado». Y todo esto sin incrementar el número de veladores.

A partir de ahora hay «dos posibilidades –indicó Espadas–: situar toda la calle al mismo nivel o no. Tal y como está ya se puede disponer del espacio sin modificar el pavimento», lo que supondría un ahorro. El alcalde insistió en que «se hablará con vecinos, establecimientos y hoteles para alcanzar un consenso», pero «ya estamos en marcha».

Finalmente aclaró que el proyecto de Mateos Gago «es distinto al de la calle Betis. Primero hay que ordenar el espacio y luego ordenar y reducir el flujo de vehículos, que es compleja, porque no hay alternativas como en Betis».

Se trata de que vecinos, trabajadores y turistas se «acostumbren» a disfrutar de esta calle única. Ya este miércoles podrán ser conscientes, por comparación, de la ventaja vivida esta mañana del día de San Fernando. Las pruebas continuarán otros días festivos o domingos, antes de la decisión final que pasa también por la unificación estética de veladores y la ubicación de estos para que molesten lo menos posible a los peatones, ya sea en las aceras o en jardineras a nivel de calle. Pronto se verá.