El peligro de dejar una botella de agua dentro del coche

Dejar una simple botella de agua en el coche puede parecer algo inofensivo, pero en realidad esconde riesgos que van más allá de un agua con un sabor desagradable.

Repasamos algunos de esos posibles problemas para que evites cualquier contratiempo para tu salud. Existen ciertos riesgos (tanto para la seguridad como para la salud) vinculados a las altas temperaturas que conviene considerar a la hora de mantener botellas de plástico en el coche. La proliferación de bacterias es uno de los principales. El calor del interior del coche, especialmente en verano, acelera la multiplicación de bacterias presentes en el agua y en la botella. Beber de ella puede provocar molestias estomacales e incluso enfermedades.

Otro de los factores de riesgo son las sustancias químicas que desprende el plástico, las altas temperaturas pueden alterar el plástico de la botella, liberando sustancias químicas que podrían ser perjudiciales para la salud a largo plazo.

Otro peligro, menos conocido pero potencialmente más grave, es la posibilidad de sufrir un incendio. En verano, y debido a esas altas temperaturas, las botellas de plástico pueden actuar como lupas, concentrando los rayos del sol en un solo punto, lo que puede encender materiales inflamables dentro del coche, como los asientos.

Multas por beber agua al volante

Aunque la propia Dirección General de Tráfico llama la atención sobre la importancia de mantenerse siempre hidratado cuando se conduce, conviene también tener en cuenta que beber mientras se maneja un vehículo podría ser motivo de multa, informa la edición digital de la RACE, por parte de un agente de la autoridad, si este considera que, al hacerlo, has limitado tu libertad de movimientos y, con ello, puesto en peligro tu seguridad y la del resto de usuarios, un aspecto que está recogido en el artículo 18.1 del Reglamento General de Circulación. En ese caso, la sanción sería de 100 euros.