Cambios en la DGT: si estás en esta lista no podrás obtener ni renovar el carné de conducir en 2025

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una actualización de las normativas para la obtención y renovación del carné de conducir a partir de 2025. Esta reforma tiene como objetivo garantizar la seguridad vial y evitar riesgos derivados de problemas de salud que puedan comprometer la capacidad de los conductores.

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado estas modificaciones, que afectarán tanto a la periodicidad de las renovaciones como a los requisitos médicos y formativos.

Cambios en la renovación

Uno de los cambios más destacados es la modificación de los plazos de renovación. Para los conductores menores de 65 años, el carnet de conducir deberá renovarse cada 10 años, como hasta ahora. Sin embargo, para los mayores de 65 años, el plazo se reducirá a cinco años.

Requisitos más duros

Los exámenes médicos requeridos para la renovación del carnet también se endurecerán. A partir de 2025, estos exámenes incluirán nuevas pruebas específicas para evaluar la visión, audición, reflejos y capacidad cognitiva de los conductores, con especial atención a aquellos que superen los 65 años. Los exámenes médicos serán más exhaustivos, y no se renovará el carnet a los usuarios que padezcan ciertas enfermedades o estén recibiendo un tratamiento médico que pueda afectar a su conducción, ya sea de forma temporal o permanente.

En este contexto, la DGT ha compartido una lista donde aparecen las 35 enfermedades que son incompatibles con la conducción. Evidentemente, cada caso se revisará de forma individual y se tendrá en cuenta el nivel de afectación, así como el tratamiento que reciba la persona.

Lista de enfermedades que condicionan la capacidad de conducir:

• Enfermedades digestivas, endocrinas y respiratorias.
• Alzheimer.
• Accidentes isquémicos transitorios.
• Depresión.
• Demencia.
• Trastorno de ansiedad.
• Arritmias.
• Enfermedades neurológicas y degenerativas.
• Hipotiroidismo y paratiroides.
• Infarto agudo de miocardio.
• Marcapasos.
• Parkinson.
• Problemas vasculares.
• Trastorno de desarrollo intelectual.
• Dolencias oncológicas.
• Epilepsia.
• Trastorno obsesivo compulsivo.
• Transplante renal.
• Trastorno del sueño.
• Trastorno por déficit de atención con hipercatvidad, etc.