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Los jueces del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla que llevan el caso de los ERE, María Núñez Bolaños y Alvaro Martín. / Jose Luís Montero
La titular del Juzgado de Instrucción número 6, María Núñez Bolaños, ha reiterado en un auto su intención de esperar a la sentencia de la rama política del caso ERE, conocida como el procedimiento específico, para decidir sobre las diferentes ayudas que se investigan dentro de este fraude. La magistrada, que admite parcialmente un recurso presentado por la propietaria de Río Grande, admite que «en un futuro» se procederá a dividir el caso en más piezas, una por cada ayuda, sin necesidad de esperar a las sentencias de las que ya están divididas.
Hasta ahora, Núñez había dividido el caso ERE en seis piezas, cuatro de ellas referidas a ayudas a empresas concretas, quedando el resto a la espera de las sentencias, ya que con ello quiere evitar «contradicciones» entre las diferentes resoluciones que se puedan ir produciendo. Sin embargo, ahora aclara que serán las sentencias sobre la trama política y las sobrecomisiones las que marquen el devenir del caso, sin necesidad de esperar a las sentencias de las otras cuatro piezas ya formadas.
La instructora reitera así lo que viene defendiendo en sus últimas resoluciones, sobre la necesidad de esperar a que se enjuicie el procedimiento específico y las sobrecomisiones pues, si las sentencias concluyen que el sistema de financiación de los ERE era legal la investigación de muchas deberían ser entonces archivadas.
Además, Núñez sostiene que en la actualidad no puede hacer un «diseño apriorístico» de la división de toda la causa porque, entre otros motivos, aún hay algunas ayudas cuya investigación está aún «en una fase muy inicial», algunas incluso en manos de la Guardia Civil. La jueza llega a decir que la complejidad de esta causa «no tiene parangón».