Las misiones de paz en países en guerra tienen como objetivos trabajar con la comunidad local y el personal militar del lugar, la protección y la salvaguarda del personal civil y el fomento de la comprensión mutua. Pero se da la paradoja que quienes persiguen estos objetivos son profesionales del ejército, gente entrenada para demostrar valentía, disciplina y fidelidad, entre otras cualidades. La película del danés Tobias Lindholm A War cuenta varios episodios de combate de un comando del ejército danés contra talibanes en Afganistán, también la dificultad de conciliar la vida familiar y profesional cuando se trabaja a miles de kilómetros de distancia, y la rendición de cuentas al Estado cuando al protagonista se le implica en un crimen de guerra. Podría parecer que se habla de la guerra, o del conflicto que vive la familia, pero lo que realmente plantea es un complejo dilema de índole moral. La incompatibilidad que existe entre la ética personal, aquella que confirma y da razón de ser a tus principios y valores y la ética marcada por el Estado, esa que aparece escrita en los papeles y que se configura en forma de leyes. Una ética que unos se aplican en situaciones límite tomando decisiones que les conllevan funestas consecuencias mientras otros la juzgan al calor del despacho y de lo escrito en los libros. Enérgica y viva, rodada con un realismo casi hiriente debido a que está hecha con cámara en mano. Una elaborada fotografía y un montaje ágil son cuestiones técnicas que acentúan la tensión, los miedos y la angustia. Reflexiva y llena de interrogantes se decanta por dar alguna respuesta, pero su discurso es tan amplio que deja abiertas y sin responder muchas preguntas.

A War ***

Dinamarca 2015 104 min.

Dirección Tobias Lindholm Intérpretes Pilou Asbaek, Tuva Novotny, Dar Salim, Soren Malling, Charlotte Munck.

Drama. EFA