El Maestranza estrena su ‘Tosca’

El célebre título de Puccini levanta el telón el próximo viernes, con seis funciones programadas, en una coproducción del coliseo sevillano con el Liceo de Barcelona

25 may 2015 / 14:37 h - Actualizado: 25 may 2015 / 22:29 h.
"Ópera"
  • El equipo artístico de ‘Tosca’ presentó ayer el título de Puccini en el Teatro de la Maestranza, a donde regresa tras ocho años de ausencia. / Fran Vázquez
    El equipo artístico de ‘Tosca’ presentó ayer el título de Puccini en el Teatro de la Maestranza, a donde regresa tras ocho años de ausencia. / Fran Vázquez

En el final de la temporada, el Teatro de la Maestranza apuesta por lo seguro. Y pocos títulos hay más fiables a la hora de hallar el respaldo del público que Tosca, de Giacomo Puccini, de la que se han programado seis funciones entre el 29 de mayo y el 13 de junio. Vuelve el drama de Floria Tosca tras ocho años ausente y en una coproducción del teatro sevillano y el Liceo de Barcelona, donde fue vista hace sólo unas semanas por más de 30.000 personas.

Un coliseo y otro han buscado, ante todo, un montaje poco costoso, de calidad y disfrutable por un público amplio. Y para que cumpliera estas tres premisas encargaron la puesta en escena a Paco Azorín, que lleva días inmerso en Sevilla en la nueva representación, sobre la que ya ha ejecutado cambios sustanciales porque «las producciones siempre están vivas, cada vez que se montan», expresó ayer.

«No se trata de una reposición sino de otro paso más en el viaje. Vamos a levantar una Tosca que me encantaría tuviera la misma repercusión que en Barcelona», subrayó Azorín, que explicó cómo esta ópera está dentro del gran repertorio y, por tanto, «esconde la dificultad de tener que huir de los lugares comunes». «Me gustaría que esta Tosca fuera, antes que cualquier otra cosa, cercana», dijo a modo de declaración de intenciones y aviso para espectadores dudosos de acudir a verla. «Es además un título ideal para quien ya conoce bien la obra, porque aporta cosas nuevas, y también es fantástica para iniciarse en la ópera», añadió.

Con los barítonos Ambrogio Maestri y Juan Pons en el papel del Barón Scarpia, Azorín se detuvo también en la explicación del sentido dramático de su montaje, que camina «con un primer acto convencional para darle la vuelta al escenario en el segundo, en el que enseñamos la trastienda del poder, con un acto mucho más teatral y dramático, hasta llegar a un tercer acto más simbólico y metafórico».

El director artístico del teatro, Pedro Halffter, que se encarga de la dirección musical, agradeció ayer la presencia de Pons, por su gesto de venir a «echarles una mano», ya que se ha incorporado a los ensayos cuando estos estaban muy avanzados. «Es un grandísimo honor poder dirigir a Pons», dijo. Pons –que ha interpretado el rol del pérfido Scarpia en alrededor de 400 funciones, el que más ha interpretado–, se retiró de los circuitos operísticos en julio de 2012 con Aida en el Liceo. Además, formó parte de ese gran elenco de artistas que en mayo de 1991 realizaron el primer espectáculo del Maestranza, un recital lírico con voces como las de Teresa Berganza, Montserrat Caballé, José Carreras, Plácido Domingo y Alfredo Kraus, entre otros.

Maestri, por su parte, comentó «sentirse muy contento» de debutar en el teatro sevillano, del que «todo el mundo habla», y hacerlo junto a Juan Pons, de quien «le gustaría llegar a tener la mitad de su carrera». La soprano china Hui He interpreta el papel protagonista, mientras que el tenor Jorge de León dará vida a Mario Caravadossi.

Junto a la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, en esta producción estarán el Coro de la Asociación de Amigos del Teatro de la Maestranza, dirigidos por Íñigo Sampil, y la Escolanía de Los Palacios, con los directores Enrique Cabello y J. Manuel Busto al frente. Tras su paso por Sevilla, Tosca llegará este verano a la Quincena Musical de San Sebastián, y más tarde volverá a reponerse en el Liceo. En este sentido, Halffter esbozó la voluntad de poder alquilar esta producción, y, en algún momento, al ser coproductores y propietarios de este montaje, amortizarlo y reponerlo «siempre que las circunstancias lo permitan».