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El cantante y guitarrista escocés Mark Knopfler, durante su actuación en el Estadio Olímpico de Sevilla. / José Luis Montero
Era el concierto más esperado del verano, y no defraudó a quienes llevaban meses esperando el momento. El cantante y guitarrista escocés Mark Knopfler actuó en Sevilla por primera vez en su larga y prolífica carrera –cuatro décadas, nada menos–, y lo hizo acompañado por una compacta banda que fue desgranando los grandes éxitos del artista junto alguna composición de su disco más reciente, Tracker.
El genio de Glasgow, quien se hiciera mundialmente conocido en los años 80 como líder del grupo Dire Straits, regaló una puesta en escena sobria y sin excesivos efectismos, fundada sobre la fuerza de canciones ya legendarias como Romeo and Juliet, Sultans of Swing, Telegraph Road y So far away, así como el tema Going home, uno de los cortes principales de la aclamada banda sonora de la película Local hero.
El público sevillano disfrutó de lo lindo a pesar de las altas temperaturas registradas ayer, apenas atenuadas por los aires nórdicos de la música de Knopfler, impregnada siempre de perfumes celtas y folkies sobre una base deliciosa y genuinamente rockera.
Tras su paso por la capital hispalense, el músico continuará su gira internacional esta semana por Oeiras (Portugal), Santiago de Compostela y Barcelona, después de cuya cita descansará hasta el mes de septiembre.