Para su debut en el largometraje Mysius va a fijar su texto y mirada en la transformación que experimenta Ava, una joven introvertida de trece años que ya con esa edad empieza a construirse un universo propio. Para su consecución no falta el conflicto familiar, el descubrimiento del sexo y del primer amor. También va a ser el verano en el que le comunican que va a perder la capacidad de ver por la noche. Una época inolvidable. Tras el shock inicial, Ava dirige la gestión de la noticia realizando ejercicios que le permitan ir adaptándose a su nueva realidad. Toma notas en un diario para exorcizar sus miedos y en este camino se da cuenta de que le ha llegado el momento de crecer y de tomar sus propias decisiones. Pero cosas del guión, en ese mismo instante se cruza con el malote de la película. Tras un par de encuentros con el joven, se olvida de ella misma y del camino de superación que estaba ejercitando. En este punto le motiva la aventura y el riesgo y se centra en cumplir los temerarios deseos del chaval, aún sufriendo el desprecio de este, pasando por tanto de la liberación inicial a la dependencia, esto es, a la condena. Ya no elige como organizar su vida, se desvincula de su familia quedando sometida a las necesidades y deseos del varón. La propuesta empoderadora de la primera parte de la película queda desautorizada y enterrada. No es una película de Hollywood pero se le parece. Tiene a su favor que estilísticamente se acerca al denominado cine de autor y posee unas interpretaciones frescas como la de Noée Abita dando vida a Ava. Hasta aquí lo bueno. En su contra, deja en evidencia que ha tratado el tema sin arriesgarse, su tono es veladamente conservador y su final aunque parezca transgresor resulta complaciente, seguramente preparado para contentar a quienes paguen por verla.
Ava *
Francia 2017 100 min.
Dirección Léa Mysius Intérpretes Noée Abita, Laure Calamy, Juan Cano.
Drama. Las nuevas olas
Natural de Burdeos (Francia), de 28 años de edad, Léa Mysius realiza estudios de literatura para a continuación pasar por la escuela nacional de cine de Francia (La Fémis) donde se gradúa en la rama de guión. Ha escrito y dirigido tres cortometrajes, Cadavre exquis (2013), Les oiseaux-tonnerre (2014) exhibido en el espacio Cinéfondation del Festival de Cannes de ese año y L´île jaune (2015) codirigido junto a Paul Guilhaume.