El Festival de danza contemporánea 'Nexos' vuelve a inundar las calles y plazas de Barbate con las imágenes hermosas y fugaces que recrean propuestas de danza contemporánea muy y diversas y de un alto nivel de calidad. No en vano el objetivo es hacer de la danza un elemento de cohesión social, dando a conocer el lenguaje y las nuevas tendencias de la danza contemporánea a un público heterogéneo, y no necesariamente aficionado a la danza. De ahí que todas las funciones sean gratuitas y transcurran en lugares públicos, como la Lonja Vieja, los exteriores del Mercado de Abastos, El Paseo Marítimo, la Plaza del Faro, el Instituto Trafalgar,
Este año la programación cuenta con las piezas cortas de cinco compañías de reconocido prestigio, cuatro nacionales, de diversas comunidades autónomas, y una de Costa Rica. Las compañías en cuestión son: Marcat Dance– Mario Bermudez, de Canarias; Led Silhouette, de Navarra; Lamajara – Daniel Rosado, de Cataluña; Jesus Rubio, de Madrid y la costarricense Lina Yiri - Camilo Regueyra, ganadora del certamen coreográfico SoloDos, cuyo primer premio consiste en una gira por diversos festivales españoles. Cabe destacar la presencia de dos bailarines y coreográfos andaluces que son ya toda una promesa de la danza contemporánea en nuestro país: el jienense Mario Bermudez y el onubense Daniel Rosado.
Al igual que en otras ediciones, 'Nexos' pondrá a disposición del pueblo Barbateño, y los visitantes que se sientan atraídos por conocer con más profundidad el lenguaje de la danza contemporánea, un programa de actividades paralelas que incluyen un concurso de pintura, consistente en la creación del cartel del festival; la exposición fotográfica del proyecto 'Baila tu barrio 2018; la creación in situ de un mural para el festival a cargo del artista barbateño Hoko, y una master class de la Cia Led Silhoutte con la Escuela Municipal de Teatro de Barbate, La Aurora.
Como novedad, cabe resaltar que este año Nexos amplia su programación a una ciudad hermanada con Barbate situada en otro continente, Larache (Marruecos). Con ello el festival se convierte en un proyecto transfronterizo que se propone estrechar y consolidar los vínculos culturales que existen entre España y Marruecos.