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Nolito, con un evidente cambio de ‘look’, disputa un balón en el entrenamiento con Sarabia, en presencia de Navas y Krohn-Dehli. / Manuel Gómez
Los primeros meses de la Liga nos deparan todos los años sorpresas. Algunas negativas y otras muchas positivas. Una de estas últimas es ver al Leganés, en su segundo año en la Primera División, en puestos europeos y siendo el conjunto que menos goles ha encajado en las nueve jornadas que se llevan disputadas (junto al Barça): tres. Con esos galones se presenta el equipo de Asier Garitano esta noche en el Sánchez-Pizjuán con el propósito de aprovechar el estado de un Sevilla que empieza a ser protagonista del otro tipo de sorpresas, las negativas. Los de Eduardo Berizzo, tras una semana negra con derrotas dolorosas en Bilbao, Moscú y Valencia, tomaron oxígeno en Cartagena en la Copa, pero necesitan, como sea, salir adelante del doble compromiso seguido en Nervión.
El primero es esta noche ante un Leganés que, de mantener la eficacia defensiva, le pondrá a los nervionenses las cosas muy difíciles. Primero, porque este Sevilla apenas mete goles (sólo lleva nueve en la Liga). Y segundo, porque no hay equipo que rentabilice más los tantos que marca que el pepinero, con gente muy peligrosa arriba como Beauvue, Amrabat, Szymanowski o El Zhar. Deberá el equipo hispalense regresar a su mejor rendimiento defensivo, el que le llevó a unas primeras seis jornadas de ensueño. A partir de ahí, los evidente problemas en el resto de facetas del juego pasan a un segundo plano.
Fiel a su filosofía, Berizzo conjugará los esfuerzos de hoy con los previstos en miércoles ante el Spartak de Moscú y los acumulados el martes en la Copa. En defensa, con Mercado dolido del lumbago y duda hasta última hora, no hay mucho donde elegir: Corchia, Lenglet y Kjaer parecen fijos, mientras que Escudero regresaría al lateral (Mercado podría ser reservado para la Champions). La buena nueva aparece en la medular, donde Berizzo recupera al jugador clave: N’Zonzi. No está para los 90 minutos, pero a buen seguro que el técnico querrá tenerlo desde el inicio para recuperar el equilibrio. En este sentido, buscará sorprender el entrenador sevillista colocando a Banega algo más adelantado en lugar de Franco Vázquez, por lo que Krohn-Dehli podría repetir en el once.
Las alternativas vuelven a aparecer en las bandas y en la posición de delantero. Ben Yedder o Muriel, Correa o Nolito y Sarabia o Navas. Bendito problema para Berizzo. Cada uno de los dos puntas jugó un tiempo en Cartagena, mientras que Sarabia y Correa disputaron el partido completo. Dada la importancia también del choque del miércoles, cualquier combinación para esta noche estaría argumentada.
El caso es que el Sevilla debe dar con la fórmula que haga que su juego de ataque sea rápido ante la mejor defensa de la Liga, que sabe cómo agruparse atrás, que dispone de un portero en forma –en el Sevilla podría producirse un cambio y ver a Soria otra vez titular– y que sabe que el equipo de Berizzo se ahoga con pocos espacios y sin circulación veloz. Garitano tiene claro su plan y tiene a todos sus hombres disponibles menos Omar Ramos. El año pasado, con algo de fortuna, el Leganés logró pescar en el río revuelto de Nervión.