Abengoa da por zanjado el ajuste laboral de su plantilla en España

La planta de Sanlúcar la Mayor no está incluida entre los activos de los que se desprenderá el grupo, que prevé cerrar la semana que viene 165 millones para ‘respirar’ los próximos dos meses

26 ene 2016 / 23:35 h - Actualizado: 26 ene 2016 / 23:42 h.
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  • La sede de la multinacional sevillana Abengoa en Palmas Altas, en una imagen de archivo. / José Luis Montero
    La sede de la multinacional sevillana Abengoa en Palmas Altas, en una imagen de archivo. / José Luis Montero

El plan de viabilidad de Abengoa, aprobado el lunes por su consejo de administración, no contempla más ajustes laborales en su plantilla de España –concentrada fundamentalmente en Palmas Altas– que el ya acometido desde finales de noviembre y que ha supuesto la no renovación o extinción de alrededor de medio millar de contratos temporales y vinculados a proyectos paralizados, según reconoció la propia empresa en la última reunión mantenida con los sindicatos.

Fuentes próximas a la compañía precisaron ayer que los esfuerzos que debían realizarse en este sentido ya se han ejecutado y que la pérdida de empleo que se producirá estará directamente relacionada con las actividades de las que se desprenderá Abengoa al no formar parte de su negocio estratégico, pero que en todo caso tendrán impacto en otros países y no en España. A fecha de 30 de septiembre pasado, últimos datos disponibles, la empresa tenía una plantilla de 28.664 trabajadores, de los que 6.593 estaban localizados en España.

En esta categoría se incluyen todos los activos y negocios a excepción de ingeniería y construcción, únicas áreas estratégicas que la multinacional pretende mantener. En el plan de viabilidad, elaborado con el asesoramiento de Álvarez & Marsal, se contemplan entre los activos no fundamentales los biocombustibles de primera generación, negocio que tiene un valor en libros de 2.500 millones de euros, pero por el que prevé ingresar una cantidad menor. Con presencia en Brasil, Estados Unidos y Europa, el grupo ya ha mantenido negociaciones para desinvertir en esta actividad. Así, la mayoría de las ventas se producirán en el exterior, donde se concentra el grueso de su actividad.

Por contra, tras analizar 200 proyectos uno por uno, se concentrará en ingeniería y construcción para terceros y con una tecnología propia, orientada al desarrollo de proyectos de generación de electricidad, incluido el área solar; desalación, transporte de energía, agua y servicios de mantenimiento. «Fuera de eso nada es imprescindible. Zapatero a tus zapatos».

Una vez aprobada la hoja de ruta, que supone adelgazar la estructura de la empresa en un tercio de los ingresos, esto es, mantener un volumen algo superior a los 4.000 millones de euros, la compañía está inmersa ahora en negociaciones para cerrar una línea de liquidez que le permita seguir respirando durante los dos meses de preconcurso para lograr un acuerdo con sus principales acreedores: bancos y bonistas.

De hecho, son los tenedores de bonos con los que se ultiman los flecos para que inyecten «en las próximas semanas» en torno a 165 millones, aunque a cambio piden unos fuertes intereses y compartir con la banca las garantías que esta tiene en Atlantica Yield (filial estadounidense). «La negociación va por buen camino y se prevé cerrarla la próxima semana», señalaron fuentes de la compañía. Si los bancos no accediesen a compartir esas garantías en la considerada joya de la corona, Abengoa podría ofrecer a los bonistas activos adicionales en prenda como alguna planta de bioenergía.

Junto a esa línea de liquidez, que se sumaría al préstamo de 106 millones recibido en diciembre, Abengoa podría materializar «en los próximos días o semanas» alguna desinversión, adicional a la ya cerrada de su antigua sede en Madrid, en la calle General Martínez Campos. El cartel de se vende permanece en la antigua sede de la compañía en la avenida de la Buhaira de Sevilla y, aunque existen ofertas, no hay nada cerrado.

Lo que sí que descarta por completo Abengoa es la venta de su participación de más del 41 por ciento en Atlantica Yield, por ser «lo bastante estratégica como para no tomar una decisión ahora», y también de la planta solar de Sanlúcar la Mayor, que la ingeniería considera una «seña de identidad» de la que no tiene intención de desprenderse.

La deuda con proveedores asciende a unos 5.000 millones, aunque hasta el momento han vencido entre 300 y 500 millones, si bien hasta marzo vencen otros 300 millones. La ingeniería está negociando con ellos alargar los plazos de pago.

EN_DETALLE

Las acciones tipo b se deprecian un 14,55%

Los títulos de clase B de la compañía andaluza cerraron ayer la sesión a un precio de 0,182 euros por acción, lo que representa un descenso del 14,55 por ciento respecto a la víspera, en la antesala de que el consejo de administración aprobara el plan de viabilidad que, a partir de ahora, deberá ser negociado con la banca y los bonistas.

El contrato de asesoría de benjumea se mantiene

Abengoa no prevé rescindir el contrato de asesoramiento que suscribió con su expresidente Felipe Benjumea, por el que percibirá 1,086 millones anuales y que estará vigente hasta diciembre de 2016. El contrato fue «pactado» con los bancos para asegurar una ampliación de capital por 650 millones y contiene cláusulas que «se deben respetar», según fuentes de la firma.

UGT se reúne hoy con responsables del grupo

El secretario general de MCA-UGT, Carlos Romero, y de Negociación Colectiva y Salud Laboral, Jesús Ordóñez, se reunirán esta tarde con la dirección de Abengoa para actualizar información sobre el estado de las negociaciones que mantiene el grupo.