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Demandantes de empleo ante una oficina del SAE en Sevilla. / Manuel Gómez
Sin rebajas y tras el fin de la campaña del olivar en el molino, febrero ha vuelto a ser un mal mes para el empleo. En la provincia no empezó la recolección de la fruta y la recogida de los cítricos no tiene tanto peso como la del olivar, así que el campo no sembró en el mercado laboral. Además, el número de nuevos inscritos en las oficinas de empleo fue importante, dejando claro que la recuperación macroeconómica no llega a quienes buscan su primer trabajo.
En el conjunto de la provincia febrero dejó 789 desempleados más respecto al mes anterior, hasta un total de 204.879 (con subida del 0,39 por ciento), en línea similar al año pasado, cuando hubo 433 nuevos parados.
Sin embargo, si comparamos los meses de febrero de 2018 y del 2017, hubo una reducción del paro del 6,54 por ciento, con 14.331 menos, según los datos de las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (antiguo Inem) difundidos por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
La subida del paro de febrero de 2018 es superior a la de 2017 y 2015 e inferior a la de 2016.
Por sectores económicos, sube el paro en el campo por ese fin de la campaña del olivar en el molino y en el colectivo sin empleo anterior, mientras que baja en el resto. Agricultura tiene 13.243 parados (703 más); la industria, 14.238 (-181); el sector de la construcción, 19.575 (-251); servicios, 136.119 (-75) y el colectivo sin empleo anterior, 21.704 (+593).
El bueno dato es la creación de empleo. En la provincia hay 707.976 afiliados a la Seguridad Social, un 0,41 por ciento más que el mes anterior (2.917 más) y, en comparación con el año anterior, un 3,69 por ciento por encima con 25.174 nuevos afiliados.
Eso sí, tal y como denuncian los sindicatos, de los contratos que se han firmado este mes, más del 94 por ciento son de carácter temporal.
Más parados en la capital
Febrero dejó en la ciudad de Sevilla 452 parados más, según los datos del Ministerio que dirige la onubense Fátima Báñez. En la ciudad hispalense, por tanto, hay 73.802 parados, un 0,61 por ciento más que en enero pero un 6,10 por ciento menos que hace un año. La evolución interanual fue positiva al pasar de 78.602 desempleados el año pasado a los 73.802 actuales, 4.800 parados menos.
Los 452 parados más registrados este febrero supone un dato negativo porque en el segundo mes de 2017 la cuesta de enero se hizo menos pronunciada y el paro descendió en 78 personas. Sin embargo, hay que recordar que la cifra de 2017 fue una excepción, puesto que en los años anteriores en el mes de febrero se registraron aumentos del paro: en 2014 fueron 854 más; en 2015, 147 y en 2016 fueron 1.555 nuevos parados.
Pero hay otra visión negativa de estas estadísticas: con la subida del paro en febrero se acumulan dos meses negativos, ya que en enero se registraron 671 parados más.
¿Y quién tiene la culpa de este aumento del paro en la ciudad de Sevilla? Sólo la construcción y la industria crean empleo. El colectivo sin empleo anterior, el sector servicios (como casi siempre) y la agricultura obtienen malos datos.
En el campo hay 1.479 parados, 42 más; en el colectivo sin empleo anterior, 9.936 con 254 nuevos parados y en el sector servicios, 52.745, por lo tanto 233 más.
Sin embargo, en la industria se registran 4.002 desempleados, 36 menos, y en la construcción, 5.640, 41 por debajo.
Por géneros, se pasó de 42.015 mujeres paro en enero a 42.372 en febrero (+357), mientras que la estadística refleja 31.335 desempleados en enero a 31.430 el mes pasado (+95).