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Manuel García Benítez (Agricultura) y Ricardo Serra (Asaja-Sevilla), en la inauguración de la jornada. / El Correo
Dentro de tres décadas la población mundial superará los 9.500 millones de personas, según los últimos datos publicados por Naciones Unidas en marzo de este año. También habrá un repunte en el consumo de calorías por persona, además de un incremento del 50 por ciento en el consumo de alimentos. Se comerán más frutas y hortalizas, así como carne, mientras que descenderá la ingesta de grano, como el arroz. Sin embargo, el suelo dedicado a la agricultura no crecerá más de un 10 por ciento a nivel mundial.
Ante estas circunstancias, el campo tiene el reto de atender a una mayor demanda mientras que crece la competencia por los recursos naturales y la incidencia de plagas transfronterizas se reafirma como uno de los grandes hándicaps del sector, señaló el coordinador de I+D+F del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa), Armando Martínez, durante su intervención en la VII Jornada de Innovación y Nuevas Tecnologías en el sector agrario, organizadas por Asaja-Sevilla y la Diputación de Sevilla.
Andalucía, con más de 4,7 millones de hectáreas dedicadas a la agricultura, además de asumir el reto de darle de comer a más gente, también tiene que hacer frente a los efectos que el cambio climático está haciendo en sus suelos. El aumento de la temperatura media y la escasez de precipitaciones «están provocando que la erosión de la tierra y la pérdida de materia orgánica», recalcó Martínez.
Por eso, el director general de Desarrollo Sostenible del Medio Rural de la Consejería de Agricultura, Manuel García Benítez, insistió en que Andalucía tiene que «afrontar estos retos a la mayor brevedad posible, buscando –además– el crecimiento sostenible», así como apostar por una alimentación sana y segura para todos los consumidores. Todo un reto para un sector que está envejecido y que adolece «de cultura tecnológica» y está escasamente adaptado.
INNOVACIÓN
En la jornada hubo tiempo para conocer nuevas herramientas que permitirán a los agricultores ahorrar costes y mejorar la productividad de sus suelos. Uno de los instrumentos que se presentaron fue la app que la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF), que ofrece al agricultor información al minuto sobre la incidencia de plagas según su ubicación, además de facilitar las novedades en ayudas. Asimismo, esta aplicación tiene una opción para que el agricultor avise de posible incidencia de una de las plagas que más temor causa entre el sector: la Xylella.
Agroslab aprovechó la ocasión para presentar su plataforma para la gestión de los cuadernos agrarios, de obligado cumplimiento para la PAC. Esta aplicación permite al agricultor hacer un seguimiento de los tratamientos o la comercialización de la cosecha, entre otros ítems, para luego poder gestionar con mayor facilidad las ayudas de la PAC. Además, permite al agricultor trabajar sin cobertura de datos, lo que facilita su utilización.
Segenet mostró los beneficios que aporta su plataforma a la hora de ahorrar en la factura de la luz. El sistema desarrollado por esta firma andaluza da alarmas al agricultor cuando se produce un exceso de consumo con tal de evitar penalizaciones en la factura final.
También en la mejora de la eficiencia energética actúa Aimcra, que trabaja en la mejora de uno de los grandes cultivos de Andalucía: la remolacha. En su apuesta por un nuevo modelo energético a través de la aplicación de sistemas de riego fotovoltaico han conseguido reducir los costes de producción, consiguiendo que el cultivo de remolacha azucarera sea más competitivo frente a otros países europeos.
En la jornada también hubo momento para abordar la gran lacra de los robos en el campo. Por ello, varios representantes de la Policía Nacional presentaron la app Alertcops, que permite comunicar directamente si se está cometiendo o se acaba de producir un robo.