La Unión Europea y el Reino Unido cierran un acuerdo de divorcio del Brexit

Ambas partes han logrado «avances suficientes» en tres áreas prioritarias: derechos de los ciudadanos, diálogo sobre Irlanda y la factura financiera. Se pasará ahora a una siguiente fase si así lo aceptan los líderes de la UE el próximo viernes

08 dic 2017 / 09:08 h - Actualizado: 08 dic 2017 / 16:38 h.
"Brexit"
  • El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker (dcha) recibe a la primera ministra británica, Theresa May, antes de mantener una reunión sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea este viernes. EFE/ Olivier Hoslet
    El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker (dcha) recibe a la primera ministra británica, Theresa May, antes de mantener una reunión sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea este viernes. EFE/ Olivier Hoslet

El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, y la primera ministra británica, Theresa May, han logrado este viernes un acuerdo para cerrar las bases del Brexit, lo que permitirá a Londres y Bruselas iniciar las conversaciones sobre las relaciones futuras una vez se produzca el divorcio si así lo aceptan los líderes de la UE el próximo viernes.

«La Comisión está satisfecha de que se hayan logrado avances suficientes en cada una de las tres áreas prioritarias --derechos de los ciudadanos, diálogo sobre Irlanda y la factura financiera--», ha anunciado el Ejecutivo comunitario en un comunicado tras un desayuno en Bruselas entre May y Juncker.

Bruselas recomendará ahora a los jefes de estado y de gobierno de la UE a 27 «concluir que haya avances suficientes en la primera fase» y decidir «si permiten que las negociaciones vayan a la segunda fase» en la cumbre a 27 del próximo 15 de diciembre.

«El resultado de hoy es por supuesto un compromiso, es el resultado de una larga e intensa conversación entre los negociadores de la Comisión y de Reino Unido», ha señalado Juncker en una rueda de prensa conjunta con May, en la que también ha destacado que ha sido una negociación «difícil» tanto para la UE como para Londres.

El jefe del Ejecutivo comunitario ha subrayado que la decisión final «está en manos» de los jefes de Estado y de Gobierno y ha confiado en que «compartan» el punto de vista de Bruselas y decidan avanzar a la segunda etapa de la conversaciones, sobre la futura relación entre ambas partes y el periodo de transición.

«Hemos trabajado extremadamente duro y no ha sido fácil para ningún lado. Cuando nos reunimos el lunes dijimos que el acuerdo estaba al alcance. Lo que hemos conseguido hoy supone una mejora representantiva», ha expresado May en la misma comparencencia de prensa.

La primera ministra británica ha celebrado en particular que el artículo sobre los términos principales del divorcio signifique que se pueden iniciar las conversaciones sobre la futura relación entre Londres y Bruselas.

Sobre derechos de los ciudadanos, Juncker ha subrayado que el acuerdo «recupera» la incertidumbre creada y asegura que los europeos que viven en Reino Unido «seguirán teniendo los mismos derechos una vez se consume la salida de Reino Unido del bloque comunitario.

Por su parte, May ha apuntado que «después de duras conversaciones» ambas partes han cerrado un acuerdo para la factura del Brexit que es «justo» para los contribuyentes británicos.

En relación a la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte, el presidente de la Comisión Europea ha destacado los «compromisos significativos» de Londres para evitar una frontera «dura», mientras que May ha garantizado que se mantendrán los Acuerdos del Viernes Santo.

IRLANDA

El acuerdo alcanzado durante la madrugada del viernes sobre el Brexit incluye plenas garantías que no habrá una vuelta a una frontera dura entre Irlanda e Irlanda del Norte, ha adelantado el ministro de Exteriores irlandés, Simon Coveney.

«¡Acuerdo confirmado!», ha escrito Coveney en su Twitter, después de que se supiera que la primera ministra británica, Theresa May, y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, acababan de cerrar un acuerdo en Bruselas.

«Irlanda que las negociaciones del Brexit pasen a la fase dos ahora que hemos logrado garantías para todos en la isla de Irlanda, protegiendo plenamente el GFA», en referencia al acuerdo de paz de Viernes Santo en el Ulster, «toda la economía de la isla y garantizando que no habrá UNA FRONTERA DURA en la isla de Irlanda tras el Brexit», ha explicado.

En opinión de Coveney, se trata de un «muy buen resultado para todos en la isla de Irlanda». «Garantizado que no habrá frontera dura», ha remachado.

Para Dublín evitar que hubiera una vuelta a una frontera como la que había antiguamente con Irlanda del Norte una vez que Reino Unido abandonara la Unión Europea era una línea roja que no estaba dispuesto a tolerar, por lo que había amenazado con vetar el paso a la siguiente fase en la negociación del Brexit, la futura relación con la UE tras el divorcio.