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El azulejo colocado en la fachada. / El Correo
La cara de la fachada de la casa hermandad que da al atrio de la Basílica de la Macarena se ha enriquecido con la colocación de un azulejo de la Virgen de la Esperanza, realizado por Cerámica Santa Ana en el año 1929 y donado por un hermano. El retablo cerámico se sitúa entre los dos balcones de la segunda planta de esta fachada de la casa de Hermandad, cuyas obras están a punto de concluir.
El azulejo representa a la Virgen de la Esperanza de cintura para arriba y colocada de medio perfil. Luce la corona de salida y el manto de malla de Juan Manuel Rodríguez Ojeda, además de las mariquillas en el pecho y varios broches colocados a modo de puñal. En sus manos, la Virgen porta varios anillos, algo característico de la época, mientras que la saya blanca parece ser la misma con que se la representa en el azulejo que remata el arco de la Macarena, obra en la que parece estar inspirada esta.
Antes de ser colocado, el retablo cerámico ha sido intervenido por los restauradores Silvia Ortego Jiménez y Carlos Peñuela Jordán. Estos trabajos de restauración, realizados desde el pasado mes de marzo, se han centrado en la consolidación del soporte y paramentos, reintegración volumétrica y cromática del conjunto, limpieza de las piezas y tratamiento de protección ante agentes atmosféricos y cambios de temperatura y humedad.