Edificios sin estrenar, otros sin uso desde hace años y muchos con plantas enteras sin inquilinos. Ese es el panorama del sector de las oficinas en Sevilla justo antes de que el mercado se revolucione con la comercialización de la torre Pelli y sus 33.000 metros cuadrados a unos 15 euros cada uno al mes más los gastos comunitarios del rascacielos y antes de que la Junta abandone más edificios arrendados para irse a una nueva macrosede junto a Santa Justa.
La mitad de los edificios de oficinas de la zona Norte de Sevilla están vacíos. Los precios siguen bajando, pero el sector no se recupera. Un ejemplo de ello lo encontramos en Torneo Parque Empresarial. Ejemplos hay muchos. El edificio Puerta de Indias, en la calle Acústica, tiene cinco plantas de las que la segunda y la tercera están desocupadas. Invercaria, de la Junta, fue una de las empresas que se mudó en plena crisis.
Pero los hay en una situación mucho peor. «En las torres de este polígono hay 14 módulos de oficina por planta y en la mayoría hay dos o tres ocupados solamente. Y mire, esos edificios junto a las torres de Vilamar tienen seis o siete plantas vacías». Así lo comenta un trabajador de Torneo Parque Empresarial, donde hay once edificios altos.
«Los de la calle Astronomía, de la torre 1 a la 5, estarán aproximadamente a un 60 por ciento de ocupación, mientras que entre los de la calle Arquitectura, del 6 al 11, hay de todo. Los 9 y 10 son los más desocupados, el resto puede estar a un 60 o 70 por ciento, siendo muy optimistas», explicaba un responsable de la empresa que los gestiona que no quiso dar su nombre a este periódico.
En su opinión, en los tres años que lleva trabajando en la empresa se ha notado un gran bajón, si bien «ahora creo que hay más movimiento, desde finales del pasado año, eso sí, no es para tirar cohetes», apostilla. Mientras tanto, bares con bocatas a dos euros y menús a 7,50 euros se anuncian con cartelería en cada esquina. «Sólo hay que ver el panel enorme que informa de los módulos que ocupa cada empresa, pone ‘disponible Vilamar’ en la mayoría», indicó María López, empleada en una empresa instalada en Parque Torneo.
Y no sólo allí. Otro complejo empresarial que se inauguró en Sevilla por la misma fecha, Royal Parque Empresarial, está en una situación lamentable. En la avenida de Parsi, en la zona Este de Sevilla y a las puertas de ésta por la A-92, incluso tiene edificios a estrenar. Son torres fantasmas.
Y es que en esta área de la ciudad, un 47 por ciento de las oficinas están vacías, según el último informe de Inerzia. Los precios, además, bajaron el pasado año otro 7,7 por ciento, hasta situarse en 4,8 euros el metro cuadrado al mes. Y algunos edificios y sus alrededores son un auténtico erial.
Pero no sólo en esta zona hay gigantes vacíos. En la avenida de la Raza, junto al puente de las Delicias, el Puerto posee un edificio que sigue sin alquilar o vender. La Junta de Andalucía tuvo muchos años oficinas allí, pero desde hace otros tantos no tiene quien lo quiera. Y enfrente, otro en la misma situación.
Abengoa tampoco vendió ni alquiló su edificio en la Buhaira, pese a que Nervión es una de las zonas de Sevilla en la que mejor funciona el mercado de las oficinas, mientras que en la Cartuja, donde se levanta el rascacielos de Pelli, los inmuebles sin uso son muchos: el pabellón de Chile, el de Puerto Rico, los edificios de Ceade o el Da Vinci son un ejemplo. Pero claro, en Cartuja incluso hay un teatro de la SGAE a la venta. Y eso que sólo un 23 por ciento de las oficinas de la isla están desocupadas, según Inerzia.